Sucesos
Un hombre muere dos veces tras suplantarle la identidad un prófugo
Huido de la Justicia, ha fallecido en un accidente de tráfico tras hacerse pasar por un hombre que lleva siete años muerto
Muerto por segunda vez y con siete años de diferencia . Es la surrealista realidad administrativa en la que fugazmente se vio inmerso un hombre que falleció hace siete años y cuya identidad le suplantó un prófugo que, a mediados de septiembre, murió en un accidente de tráfico ocurrido en Bujaraloz (Zaragoza), el tramo aragonés de la carretera N-II.
Un turismo y un camión chocaron frontalmente en este peligroso tramo de la red viaria española, uno de los que acumulan mayores y más dramáticas tasas de siniestralidad. El conductor del turismo murió allí mismo.
Cuando los agentes de Tráfico buscaron la documentación que portaba el fallecido se llevaron una macabra sorpresa: los nombres y apellidos que constaban en sus documentos de identidad eran los de un hombre que había fallecido en el año 2010.
A partir de ahí quedaba el reto de dar con la auténtica identidad del hombre muerto en el accidente de tráfico. Las gestiones incluyeron una toma de huellas que, a la postre, ha resultado fundamental para resolver el caso: esas huellas tomadas al cadáver han sido cotejadas con las bases de datos lofoscópicas del Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil, que han constatado la identidad real del fallecido en la N-II. Se trata de un hombre de 60 años, con largo historial. Su último domicilio conocido estaba en Barcelona, pero llevaba tiempo fugado de la Justicia.
Constaban contra él tres requerimientos dictados por diferentes juzgados y, además, la Policía autonómica catalana había cursado al resto de cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado una notificación de fuga de este individuo, que era buscado desde el 20 de diciembre de 2014 al no haber vuelto al centro penitenciario de Lledoners de Manresa (Barcelona) tras un permiso.
Según han indicado desde la Guardia Civil, «tras la investigación llevada a cabo se ha verificado que el conductor fallecido estaba cometiendo un presunto delito de falsificación de documentos de identidad». La Guardia Civil mantiene abiertas las investigaciones para determinar si la documentación falsa que portaba ese hombre había sido utilizada en algún otro país.
