Detenido tras atrincherarse en su bar y amenazar con hacerlo saltar por los aires

El dueño de un bar de Zaragoza ha sido detenido tras encerrarse en su establecimiento , provisto con un cuchillo y amenazando con hacerlo volar por los aires con bombonas de butano. La situación se mantuvo durante varias horas, obligó a evacuar el bloque de pisos en cuya planta calle se encuentra el bar, y forzó también a movilizar a agentes del Grupo de Operaciones Especiales (GOES) de la Policía Nacional.

Ante el temor a que cumpliera su amenaza e hiciera estallar las bombonas de butano con él dentro -decía insistentemente que esa era su intención, para quitarse la vida-, la Policía evacuó la zona con mayor riesgo, restringió el tránsito por esta zona de Zaragoza -el bar está en el número 89 de la Avenida de América- y desplegó un amplio dispositivo de vigilancia. Además, los bomberos se encargaron de cortar el suministro de gas natural en esa zona, para evitar males mayores en caso de que se produjera una deflagración intencionada.

El hombre, de poco más de 40 años de edad, permaneció atrincherado durante casi tres horas , en las que un negociador de la Policía Nacional insistió en tranquilizarle y en instarle a que depusiera su actitud.

Tras dos horas y media de tensa espera, en torno a las 2.30 horas de la noche se resolvió la situación: cuando los agentes determinaron que el atrincherado se había tranquilizado lo suficiente, intervinieron y procedieron a su detención. Fue trasladado a un centro hospitalario para evaluar su estado psicológico. Ahora tendrá que responder por un delito de amenazas y por otro de resistencia a agentes de la autoridad.

Se da la circunstancia de que el pasado lunes se produjo en la provincia de Zaragoza otro episodio similar de un hombre atrincherado que amenazaba con quitarse la vida. En ese caso fue un agente de la Polícia Nacional, que se encontraba de baja médica, quien accedió a los juzgados de La Almunia , obligó a salir a todos quienes estaban en esas dependencias y se encerró, provisto con un cuchillo y una pistola. Tras casi cinco horas, se consiguió que depusiera su actitud y fue detenido sin mayores consecuencias.