Trabajo
Denuncian las peligrosas condiciones laborales que soportan los bomberos forestales de Aragón
CGT ha comunicado que, durante el último mes, tres de estos profesionales han sufrido golpes de calor por sobresfuerzo
Tres bomberos forestales del Gobierno aragonés han sufrido golpes de calor por sobresfuerzo durante el último mes. Así lo ha denunciado públicamente los representantes sindicales de CGT en la empresa pública Sarga, la sociedad del Gobierno regional de la que dependen los equipos forestales de extinción.
CGT lo ha puesto como ejemplo de las peligrosas condiciones laborales a las que, según este sindicato, están sometidos los bomberos forestales, «con jornadas maratonianas» a altas temperaturas y de extrema exigencia física . A juicio de CGT, son «unas condiciones laborales lamentables», «una mezcla explosiva de trabajo físico preventivo de incendios y, si se da el caso, acudir luego a la extinción de un incendio forestal».
Según este sindicato, «con jornadas de 22 horas sin pernocta» en esas condiciones, el riesgo para la salud de estos trabajadores es muy alto en su día a día. Los bomberos forestales «tiran una moneda al aire cada vez que salen de casa y acuden a trabajar con cuarenta grados a la sombra, desarrollan su trabajo habitual y después, al atardecer, acuden a un incendio toda la noche». Y advierte CGT que el riesgo de mortalidad en un golpe de calor por esfuerzo es del 70% si no se atiende la necesidad hospitalaria en dos horas , un lapso de tiempo que en muchos casos es muy difícil de alcanzar cuando se trabaja en zonas geográficas aisladas, como son en las que a menudo trabajan los bomberos forestales.
Para reducir este riesgo, CGT ha exigido al Gobierno aragonés y a su empresa pública Sarga «que se paralicen de inmediato todos los trabajos selvícolas que las Cuadrillas Terrestres de incendios forestales realizan durante el periodo estival en materia de prevención para evitar un desencadenante fatal hacia la salud» de los bomberos forestales. Este sindicato ha afirmado que la petición ya se la trasladaron a la dirección de Sarga el 26 de junio, pero no ha sido atendida hasta el momento.