La cuenca del Ebro, en alerta por alto riesgo de inundaciones
La punta de la crecida llega este fin de semana al tramo riojano y navarro del Ebro, desde donde se adentrará en Aragón
La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha emitido una alerta por crecidas extraordinarias en esta cuenca hidrológica. Las intensas y continuadas lluvias y nevadas que han descargado en esta parte de España durante días han provocado un brusco aumento de caudal en los ríos de su margen izquierda. Existe un alto riesgo de inundaciones en tierras ribereñas , a la vista de los elevados caudales previstos para el Ebro a su paso por La Rioja, Navarra y Aragón.
La CHE se afana en utilizar los embalses como barrera de contención para reducir, en la medida de lo posible, el impacto de esas crecidas. Se intentan regular los caudales, pero la situación es complicada y el margen de maniobra limitado.
Los esfuerzos se centran en pantanos como el de Eugui, en el río Arga, el embalse de Sobrón (Ebro) o los de Itoiz y Yesa, en el río Aragón. Además, se están realizando desembalses preventivos en la gigantesca presa de Mequinenza , situadas en el tramo bajo del Ebro, en el límite entre Aragón y Cataluña. El objetivo en este caso es dejar hueco para que, ante la fuerte crecida, tenga espacio para contener la riada y cortarle el paso hacia Cataluña .
Este viernes ya se ha activado la alerta por «riesgo importante» del Ebro en Logroño , y por «riesgo» (a secas) en las localidades navarras de Funes -por la crecida del río Arga-, de Andosilla -por el río Ega- y en Castejón -por el Ebro-.
La punta de esta fuerte riada del Ebro llegará este sábado a Logroño con un caudal esperado de más de 1.400 metros cúbicos por segundo, según las estimaciones del servicio de predicción de la CHE. En suelo navarro, el Ebro se prevé que supere los 2.200 metros cúbicos por segundo en las localidades de Castejón y Tudela durante este fin de semana.
El temor cunde también en los pueblos aragoneses ribereños del Ebro, donde además están faltando previsiones de caudal. El Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la Confederación Hidrográfica del Ebro ha dejado de ofrecer predicciones de caudal en los municipios zaragozanos situados aguas arriba de la capital aragonesa, los más expuestos a la crecida, con miles de hectáreas de cultivo y varios municipios en vilo. Esta riada, con alto riesgo de inundaciones, se adentrará en suelo aragonés el domingo.
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