Tribunales
Condenado a 10 años de cárcel por violar a una joven a la que citó para una entrevista de trabajo en Zaragoza
El agresor ya había sido condenado en 2017 por un caso de abusos sexuales y otro de acoso
Acudió en busca de empleo a una entrevista de trabajo y terminó violada, penetrada por vía vaginal, anal y bucal en un polígono industrial en los alrededores de Cuarte de Huerva, una localidad próxima a Zaragoza capital. El autor, un hombre de 50 años natural de Ecuador, ha sido condenado ahora a 10 años de prisión por esos hechos. Ha recibido la condena en la cárcel, donde se encuentra cumpliendo otras penas previas. En su currículum delictivo le consta otra condena por abusos sexuales y por acoso, que se le impuso en 2017.
El 23 de abril de 2018, cuando cometió la violación por la que ahora ha sido sentenciado, Gustavo A. L. regentaba un restaurante en Cuarte de Huerva. Estaba en libertad porque se le había suspendido la pena de prisión por los casos previos de acoso y abusos sexuales. El tribunal optó por otorgarle ese beneficio tras valorar que el acusado reconociera aquellos primeros delitos e indemnizara a sus víctimas. Pero, posteriormente, fue condenado por otros hechos y tuvo que ingresar en la cárcel, de ahí que ahora se encuentre cumpliendo aquellas otras penas.
La violación que cometió en abril de 2018 la consumó con una joven a la que había citado horas antes para una entrevista de trabajo. Según relata la sentencia que acaba de dictar la Audiencia Provincial de Zaragoza, Gustavo A. L. contactó con ella a través de una aplicación de búsqueda de empleo.
Se citó con la joven en su restaurante a útima hora de la tarde. Una vez allí, la invitó a cenar y le insistió para que bebiera alcohol. Luego le propuso mantener relaciones sexuales, a lo que ella se nego. Según el relato de hechos probados de la sentencia, el acusado se ofreció a llevarla a casa en coche y, una vez en ruta, acudió a un polígono industrial, donde consumó la violación. Tras la agresión, la joven tuvo que pedir un taxi para volver a su domicilio.
El acusado negó la versión de la denunciante, se declaró inocente y su abogado pidió la absolución. Sin embargo, el tribunal ha dado plena credibilidad a la joven. «La declaración de la víctima es clara, persistente en el tiempo y sin contradicción alguna, sin que se advierta motivo espurio alguno», indica el tribunal en su sentencia. Entienden que «sin ningún género de dudas» se trata de una violación, que la joven se negó a mantener relaciones sexuales y que las pruebas genéticas confirman que fue penetrada por el acusado.
Además de 10 años de prisión, la Audiencia de Zaragoza lo ha condenado a indemnizar a la víctima con 12.000 euros . Además, cuando salga de la cárcel, estará sometido a 10 años de libertad vigilada.