La visita de Sánchez a la isla es su primera visita oficial a Cuba y el primer viaje de trabajo de un presidente español a la isla en 32 años. La visita de Sánchez comenzó con su llegada a la Plaza de la Revolución, donde está el Palacio Presidencial. Sánchez viaja acompañado del ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Josep Borrell, y de la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto.. También del secretario general de Presidencia para Asuntos Internacionales, UE y G2, José Manuel Albares; el responsable económico, Manuel de la Rocha y el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Oliver.. Sánchez le ha trasladado a Díaz-Canel que le haría ilusión que los Reyes viajasen a Cuba en 2019. Tras la llegada de Díaz-Canel a la presidencia de Cuba, éste se reunió con Sánchez en septiembre en la sede de la ONU Nueva York, le invitó a él a viajar a la isla y confirmó la invitación al jefe de Estado. Sánchez impulsará inversiones en Cuba y pondrá la relación económica «a la altura de los vínculos históricos». «No queremos limitarnos a ser testigos del despegue que se producirá de la economía cubana, queremos acompañarlo y sustentarlo, va a ser bueno para ambos países», ha enfatizado Sánchez. Sánchez se ha mostrado «muy agradecido» por la «confianza» mostrada por el Gobierno cubano a las empresas españolas. El vicepresidente de Cuba, Ricardo Cabrisas, agradeció en presencia del jefe del Gobierno de España, el socialista Pedro Sánchez, la «confianza y comprensión» del empresariado del país ibérico ante la deuda de unos 30.