Viruka no encuentra su sitio en el Grupo Mixto

A Elvira García, apodada Viruka, le está costando encontrar un nuevo rol en la Cámara Alta. Tras ser excluida de Podemos al destaparse que habitaba una vivienda de alquiler social que no pagaba, García anunció que no devolvería su acta, por lo que la única salida pasa por su incorporación al Grupo Mixto. Un fichaje que no termina de gustar a sus nuevos compañeros, que ya han marcado sus condiciones para aceptar -que no integrar- a la senadora. Según ha podido saber ABC, han dejado a García sin portavocía al excluirla del turno rotatorio por el que cada mes se designa a un portavoz del grupo. Con el consiguiente perjuicio económico para la senadora.

Además, solo tendrá derecho a estar en una comisión, en la que será viceportavoz, aunque todavía no se sabe a cuál se incorporará. En su defensa, García llegó a afirmar que tiene mucho que aportar al debate territorial, pero fuentes de Podemos aseguraron a ABC que «no dio un palo al agua» y que hasta ahora solo había realizado una pregunta oral en Pleno , cuestión que le prepararon sus excompañeros en el Senado.

En una reunión ayer en la Cámara Alta con sus nuevos compañeros, García explicó su situación. Al parecer, matizó que en las fotos que colgó en redes sociales comiendo jamón y bebiendo champán tras ser investida se habían interpretado mal, pues la bebida en realidad era cava. En esta línea se definió como una víctima de las luchas internas de Podemos . El grupo mixto planea aplicarle una suerte de cláusula antitransfuguismo.