Una unidad hospitalaria para ayudar a los menores víctimas de la violencia sexual
Una madre habla de cómo la felicidad de su hija fue desarmándose poco a poco pasando de ser una...
Una madre habla de cómo la felicidad de su hija fue desarmándose poco a poco pasando de ser una niña alegre a una niña introvertida que lloraba con mucha frecuencia. Esa menor explicó con sus palabras el motivo de su angustia y ese día esa madre supo que su hija estaba siendo abusada. En la unidad de agresiones sexuales a menores del hospital Vall d'Hebron un dibujo ayudó a señalar a quien sufría las heridas y a quien las provocaba mostrando cómo la víctima también se siente culpable ante esa situación que en un 65 por ciento de los casos se da en el entorno familiar y por ello es importante trabajar con las familias en la recuperación. En un año han atendido más de trescientos casos: "Llenó a mi niña de seguridad, que por miedo no se puede callar. Hoy mi niña es una niña normal".