Los trabajadores de salas de escape piden poder abrir y reclaman ayudas para el sector

Un centenar de personas, entre propietarios y trabajadores, del mundo de los juegos de escape se han concentrado este lunes en la plaza Sant Jaume de Barcelona para reclamar a la Generalitat que ayude al sector. Los participantes en la concentración han leído un manifiesto explicando su situación y han guardado un minuto de silencio simbolizando la muerte de este tipo de locales de ocio. Javier González, dueño de una sala de escape, cuenta que actualmente hay más de mil escapes room en Cataluña y que un 30 % ya ha cerrado, una cifra que podría llegar al 70 % si las autoridades siguen de brazos cruzados. Se quejan de que los han incluido dentro del gran sector del ocio a la hora de establecer las restricciones en esta segunda ola de la pandemia. Insisten en que ellos son establecimientos seguros, con cita previa, grupos de menos de 6 personas y donde se lleva a cabo una desinfección constante. Quieren abrir al público. La mayoría son menores de 45 años que siguen pagando gastos de alquiler y no tienen ingresos. Por eso reclaman ayudas, porque no han recibido nada.-Redacción-