Entrevista a Mónica Gracia, Secretaria general del Sindicato Unificado de Policía
SUP: «El secretario de Estado tiene por ahora el apoyo de nuestra organización»
«Ha habido policías que trabajaban fuera de la ley, no al servicio de los ciudadanos, sino de otros intereses»
![Gracia ha sido reelegida con el 94,8% de los votos](https://s1.abcstatics.com/media/espana/2017/06/26/monica-k7tG--620x349@abc.jpg)
Mónica Gracia ha sido reelegida esta semana secretaria general del SUP, el sindicato mayoritario de la Policía, en el XI Congreso Nacional de este sindicato celebrado en Toledo. Su candidatura obtuvo el 94,8 por ciento de los votos; su informe de gestión solo tuvo un voto en contra. En esta entrevista, la mujer con más poder dentro del Cuerpo analiza la la Institución.
—¿Cuál es su diagnóstico sobre la situación que vive la Policía?
—Es de las peores desde la Transición, principalmente por el descrédito que vivimos día a día. No se cuestionan unos mandos o unas personas en concreto, sino que se pone en entredicho nuestra profesionalidad. Es responsabilidad de nuestros mandos policiales y políticos solucionar esta anomalía , porque no refleja la realidad de la Policía. Hay grandes profesionales, se hacen infinidad de servicios y muchos de ellos ni siquiera quedan reflejadosen los medios de comunicación.
—¿Hasta qué punto es consecuencia de factores como la mal llamada «policía política»?
—Preferimos decir que había policías que actuaban fuera de la ley.
—¿Usted cree que hubo un grupo de policías que actuaban al servicio de los intereses del Gobierno?
—Sí, aunque es triste reconocerlo. Realmente no sabemos si en verdad estaban al servicio del Gobierno o bien s ervían a otros intereses, pero lo que sí tenemos claro es que no trabajaban al servicio de nuestro colectivo ni al de los ciudadanos, que son a los que nos debemos. No podemos ser marionetas en manos de los políticos.
—¿Han cambiado las cosas en esta etapa del Ministerio del Interior?
—Es un poco pronto para valorarlo, pero por lo menos el trato con nuestra organización ha mejorado. Con el anterior ministro tuvimos una primera toma de contacto en el pleno del Consejo de la Policía y fue la última; no volvimos a reunirnos durante esos cinco años. Ahora es verdad que hay un diálogo, que cuando vino este ministro con el secretario de Estado de Seguridad y el director general de la Policía manifestó que quería mantener una reunión con cada organización sindical y al principio nos sonó a palabras vacías. Pero lo cierto es que se ha materializado esa reunión , de modo que algo ha cambiado. Pero lo que queremos ya son hechos.
—El mismo día que el secretario de Estado, José Antonio Nieto, participaba en la inauguración del Congreso del SUP era reprobado en la Cámara Baja. ¿Que valoración hace de esa circunstancia?
—Como sindicato solo podemos decir que son cuestiones que sobrepasan nuestro ámbito de actuación. Son asuntos políticos y no hay datos ciertos de qué se habló en esa reunión con Pablo González. Emitir una opinión sería una falta de responsabilidad. Pero sí que es verdad que este secretario de Estado conoce nuestra Institución y vemos que se preocupa porque el trato a la Policía y a la Guardia Civil vuelva a ser equitativo, ya que antes había una tendencia más favorable a este último Cuerpo. Por ahora, tiene el apoyo de nuestra organización.
—¿Sentían un rechazo del Gobierno a las organizaciones sindicales?
— Lo que ha habido es una falta de respeto sistemática. Ha sido una etapa oscura en cuanto a relaciones que ha llevado a unas leyes que han sido impuestas de manera sistemática, como la Ley de Personal, la jornada laboral, la Ley de Seguridad Ciudadana, la de Seguridad Privada... Ha sido una época de mucha normativa, pero para nosotros casi al cien por cien nefasta.
—¿Cuáles son sus tres objetivos para el SUP en los próximos cuatro años?
—Primero, que se produzca el reconocimiento económico que nos merecemos. Somos la Policía peor pagada del Estado, a pesar de ser la que más competencias tenemos. Si el país ya ha salido de la crisis, y nosotros hemos hecho un ejercicio de responsabilidad, ya toca una mejora económica. El segundo objetivo es conseguir los medios materiales y humanos para poder hacer frente a una delincuencia que está en permanente evolución. Los que tenemos ahora son escasos y obsoletos. En cuanto a número de agentes, hemos perdido casi 10.000 desde 2011. Tiene que haber una tasa de reposición estable, y que eso sea fruto de un acuerdo de todos los partidos, porque esta es una política de Estado. Sin seguridad no hay libertad, y sin libertad no hay derechos. El tercer pilar serían cuestiones normativas, como el desarrollo de la Ley de Personal, la jornada laboral, el catálogo de puestos de trabajo...
—¿Qué lectura hace de este Congreso Nacional del SUP?
—Creo que ha sido un punto de inflexión después de cuatro años muy convulsos, con problemas internos. El sindicato sale de este Congreso más fuerte, más unido y con las mismas ganas de siempre de defender los derechos de los compañeros.
—Su llegada a la Secretaría General hace cuatro años supuso una ruptura respecto a la etapa anterior, volcándose en la acción sindical y no en otras cuestiones.
—Es que esa es la razón de ser de nuestro sindicato, sin que ello suponga que nuestra organización se desentienda de otras cuestiones que afectan a los ciudadanos. Pero es verdad; hemos hecho un cambio de estilo, de imagen, y no nos va mal. En estos cuatro años tenemos unos 900 afiliados más, a pesar de las jubilación de 3.000 afiliados nuestros y que no haya habido aumento de plantilla. Y además hemos tenido los mejores resultados de nuestra historia en las elecciones sindicales, con siete vocales en el Consejo de la Policía. Pero todo esto es un trabajo en equipo.
—Siendo la mujer con más poder dentro de la Policía, es usted una gran desconocida para la opinión pública. ¿Es por decisión suya?
—Sí; creo que la sobreexposición mediática por querer tener protagonismo no beneficia en nada al sindicato. Respeto todos los modelos de sindicalismo, pero nosotros no estamos para hablar sobre investigaciones en curso, ni para hacer de asesores en televisión en casos policiales, sino para salir en los medios cada vez que haya que defender un interés sindical. No hacemos ningún favor a los agentes que están investigando, ni a la Institución cuando explicamos cómo trabajamos, porque eso es dar pistas a los malos. Es verdad que el SUP ha cambiado esa línea de comunicación.