Sánchez reconoce como interlocutor válido al inhabilitado Torra al hablar hoy con él
Se verán en «los próximos días» para oficializar la mesa de diálogo entre gobiernos
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Los gabinetes de Pedro Sánchez y Quim Torra retomaron sus contactos este miércoles para que el presidente del Gobierno y el de la Generalitat hablen por teléfono, primero, y se reúnan, después . Tras la investidura del líder socialista y pese al no de JpC en la votación del Congreso –a diferencia de ERC, que se abstuvo–, por un lado, Torra intenta recuperar protagonismo político, a la espera de la decisión del Tribunal Supremo sobre su inhabilitación dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) y la Junta Electoral Central (JEC) –decisión que ayer recurrió ante el Supremo–; y por el otro, Sánchez pone en marcha la «mesa de diálogo, negociación y acuerdo entre gobiernos » pactada entre el PSOE y ERC para abordar lo que independentistas y socialistas definen como «conflicto político».
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Meritxell Budó, portavoz de la Generalitat, fue quien avanzó, ayer, que los equipos de Sánchez y Torra están preparando el contacto. Este se producirá tras la llamada telefónica prevista para hoy, según confirmaron fuentes de La Moncloa, informa Víctor Ruiz de Almirón, que permitirá concretar una reunión –en el marco de encuentros bilaterales con los presidentes autonómicos, por lo que el primero será Urkullu– antes de que se ponga en marcha la «mesa de diálogo», que iniciará sus «trabajos» en los primeros quince días tras la formación del Gobierno, previsiblemente, la semana próxima. Por lo tanto, «en los próximos días», en palabras de Budó, se verán Sánchez y Torra.
Solo independentistas
A esta cita, el presidente de la Generalitat espera llegar con las reivindicaciones del mundo independentista, dejando a un lado su representación de todos los catalanes. Así lo confirmó Budó al recordar que Torra ya mantiene contactos con los partidos secesionistas del Parlamento de Cataluña (JpC, ERC y la CUP) y con las principales asociaciones de este sector: la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, sin renunciar a otras entidades, pero siempre que reclamen la secesión de la región. Con todos el presidente autonómico acordará «los contenidos, las condiciones y las garantías» de la negociación con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
De esta manera, Torra pretende ampliar –o modificar– el acuerdo entre el PSOE y ERC . «Nunca se ha llevado a cabo entre el Govern y el PSOE, y siempre ha quedado en manos de los partidos. Uno de los partidos que forma parte del Govern –en referencia a ERC– ha negociado facilitar la investidura de Sánchez. Por parte del Govern la voluntad es que todos los actores del independentismo puedan formar parte de este acuerdo», añadió Budó, en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del gobierno catalán.
Desde las filas de JpC, partido que todavía controla la Presidencia de la Generalitat, se sube así las exigencias al Gobierno de Sánchez –a quien recordaron que no han renunciado a la figura del relator que consta en el acuerdo de Pedralbes de noviembre de 2018– y se pone de relieve que las discrepancias entre este partido y ERC siguen existiendo incluso en el seno del Gobierno catalán. Así lo puso de manifiesto, también, Pere Aragonès, vicepresidente autonómico y líder de ERC, tras Oriol Junqueras, en prisión, al señalar, ayer, que el Gobierno catalán planteará en la «mesa de diálogo» que el Gobierno de España se retire de todas las causas judiciales abiertas en las que participa contra actos de los líderes independentistas. «Será una de las cosas que pongamos encima de la mesa, el fin de la represión. Y pasa, entre otras cosas, por esto –por la retirada del Gobierno de esas causas–», dijo Aragonès, en Catalunya Ràdio.
«Pelea interna»
Este «fin de la represión», como exigencia del independentismo en la mesa entre gobiernos, cumple al pie de la letra con las condiciones que ERC defiende desde hace semanas. Sin embargo, tras las declaraciones de Aragonès, desde el PSC se apresuraron a dejar claro que una cosa es lo que pida ERC y otra, lo que se acuerde.
Fue José Zaragoza, diputado del PSC en el Congreso, quien recordó que «sus posiciones no tienen que ver con las nuestras. Nosotros creemos que la ley está para cumplirla y no estamos a favor de un referéndum de autodeterminación». Y advirtió de que si el diálogo «se complica» no será por la posición del Gobierno sino «por la pelea interna dentro del independentismo».