El reto de pasar la ITV

El verano recuerda a vacaciones  y a muchos conductores, que deben poner el coche a punto.   La normativa establece que la Inspección Técnica de vehículos es obligatoria. No cumplirla es sancionada con doscientos euros de multa. Pero los centros están colapsados. La flota automovilística crece sin parar. Cada revisión dura una media hora y pedir cita por internet conlleva meses de espera en provincias como Mallorca, Guipúzcoa o Alicante. Los más rezagados pueden llevarse un disgusto por circular sin la pegatina.También hay quienes "han visto el negocio"  en este caos. Algunos talleres han reservado gran cantidad de citas sin especificar los vehículos y luego cobran un extra a sus clientes por estas revisiones.  Otros, se han dado de alta de autónomos para  ganan dinero llevando coches de particulares a pasar la ITV, fraudes con los que ahora se intenta acabar.En Mallorca hay un millón de vehículos, uno por cada habitante, incluyendo niños, ancianos o personas que no conducen. Miles de turistas desembarcan en época estival, demandando gran cantidad de  coches de alquiler.  Hasta ayer pasar la revisión era misión imposible.  Pero el Consell ha puesto en marcha un nuevo sistema informático por el que concederá 15.000 citas más.