Las redes sociales prohíben los perfiles falsos pero no los atajan
Aunque aseguran que incorporan medidas para evitarlos, la realidad les desmiente
Facebook asegura haber detectado un repunte de los ataques de spam a gran escala en numerosos países
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Los perfiles falsos y las redes de «bots» son una de las problemáticas más difíciles de atajar a la que se han visto sometidas las redes sociales en los últimos años. Cuatro años después del escándalo de Cambridge Analytica en Facebook , las empresas tecnológicas todavía lo sufren, aunque aseguran haber incorporado medidas para evitarlo. Pese a sus esfuerzos, la realidad es otra: es una lacra difícil de contener.
Las reglas de uso de las plataformas digitales lo dejan claro: la creación de perfiles «fake» está prohibido, aunque no es ilegal en términos jurídicos. En el caso de Twitter, red de micromensajes, no se pueden realizar «actividades coordinadas» que influyan de forma artificial las conversaciones mediante el uso de cuentas falsas o acciones automáticas. Pese a los controles, siguen colándose. El año pasado se suspendieron, por ejemplo, 130 cuentas falsas vinculadas a ERC por manipular.
Twitter funciona, en realidad, a dos velocidades. Por un lado, su epidermis, la que está cara al público. Son los mensajes que publican sus usuarios. Pero en sus tripas, donde el ojo no ve, circulan unas aguas muy distintas. Bajo un sepulcral anonimato, equipos de revisores y algoritmos de detección de contenido trabajan para poner en barbecho los mensajes y perfiles que se quedan fuera de sus normas de uso. Una larga retahíla de prohibiciones entre las que se incluyen desde la «incitación al odio», «spam» o «integridad electoral» , así como cualquier acción que tenga como propósito «amplificar o suprimir información de forma artificial». Tampoco se puede, sostienen, aumentar de forma artificial la base de seguidores o la de otros por medio de actividades de compra-venta de seguidores.
Sus sistemas internos están preparados, aseguran desde la empresa estadounidense, para detectar todo comportamiento anómalo y suspender los perfiles temporalmente hasta que el propietario corrija el problema, que en muchos casos es el hecho de no haber completado el formulario de verificación. El objetivo es comprobar que es una persona la que está detrás. Según su informe de transparencia, en 2019 se denunciaron 11 millones de cuentas por infracciones de sus reglas, un aumento del 19% respecto al año anterior. De ellas, unas 6.388 fueron señaladas por gobiernos, un 17% más.
Las redes sociales usan herramientas de detección de patrones que emplean un sistema de puntuación de las actividades de sus usuarios. «En el caso de que se detecte un patrón de conducta y parezca que es un bot pueden tomar una serie de medidas como suspender la cuenta y pedir una verificación», explica a este diario Sergio Carrasco , experto en derecho digital de Fase Consulting . «El problema -dice- es que no todas estas cuentas son “bots”». Desde que se detecta una posible vulneración del servicio hasta que se toman acciones por parte de la red social puede tardar tiempo.
«Investigamos la información compartida por el gobierno y encontramos un incremento global de spam y de falsos me gusta y los hemos eliminado»
Facebook es la más afectada por este problema. En 2019 se descubrió que albergaba más de 400 millones de perfiles falsos. En un año se identificó y eliminó la friolera de 6.500 millones de cuentas «fake», según datos internos. Para Carrasco, sin embargo, «el procedimiento de eliminación se tiene que mejorar porque se sabe que hay perfiles falsos que han sido denunciados y han tardado mucho tiempo hasta que se suspenden».
La compañía ha asegurado haber detectado un repunte de los ataques de spam a gran escala en numerosos países y en páginas de todo tipo.En principio, suele bloquear millones de intentos de crear cuentas falsas diariamente y son capaces de detectar en cuestión de minutos después de la creación un perfil falso, ya que estas suelen estar involucradas en acciones de tipo «spam». « Revisamos continuamente la actividad que se realiza en nuestra plataform a y tomamos medidas si encontramos violaciones de nuestras políticas», valora para ABC un portavoz de Facebook.
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