Así es la propuesta de reforma constitucional del PSOE
Pedro Sánchez incluye la renta mínima vital y admite que Cataluña no baje puestos en renta tras aportar a la solidaridad común
La propuesta de reforma de la Constitución de 1978 que hoy va a aprobar el Consejo de Política Federal del PSOEno admite otra nación que la española; todo lo más, reconoce «las singularidades de distintas nacionalidades y regiones y sus consecuencias concretas: lengua propia; cultura; foralidad; derechos históricos; insularidad; organización territorial o peculiaridades históricas de derecho civil», según el documento, de diez páginas. Finalmente, ni Pedro Sánchez ni el resto de los barones aceptan la «nación» catalana, como quería el PSC, pero sí «racionalizar, clarificar y completar el sistema de distribución competencial , incluyendo la delimitación, al máximo posible, de los ámbitos respectivos en las competencias compartidas y enunciando de manera precisa los títulos competenciales de carácter horizontal del Estado». Un Estado al que el PSOE atribuye la garantía última «de la igualdad de todos los españoles en sus condiciones básicas de vida, en el disfrute de los servicios básicos esenciales (...) así como la igualdad en el territorio en el que se resida».
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Los socialistas quieren que «los elementos fundamentales» del sistema de financiación autonómica figuren en la Carta Magna y no en la actual ley orgánica (LOFCA). Y que sus principios rectores sean: «autonomía financiera, suficiencia, corresponsabilidad, coordinación, solidaridad y equidad interterritorial». Eso sí, después de obligar a que haya «niveles similares de servicios públicos» en las 17 comunidades, el PSOE acepta la petición del PSC de incluir el principio de «ordinalidad» para acabar con la principal queja catalana: «que la contribución interterritorial no coloque en peor condición relativa a quien contribuye respecto de quien se beneficia».
«Lealtad federal»
El PSOE, que plantea esta reforma constitucional para hacer frente a la crisis catalana, pide introducir en la Carta Magna el principio de «lealtad federal» al Estado. Habrá una reforma del Senado para convertirlo en Cámara territorial, aunque se deja abierto el modelo final de eleccion de senadores y las circunscripciones.
En materia social, el PSOE quiere volver a reformar el artículo 135 de la Constitución, que modificó Zapatero en 2010. Busca condicionar el pago de la deuda a la «estabilidad social» para que «con criterios de sostenibilidad, aseguren en la distribución del gasto público un nivel adecuado y suficiente de financiación de los servicios y prestaciones sociales». La salud será derecho fundamental, para blindar el sistema público universal, y se reconoce el derecho a «una renta o ingreso mínimo vital ante situaciones de carencia efectiva para el mantenimiento de una vida digna».
Las «personas» son iguales
En la reforma socialista habrá derecho a la tutela judicial en caso de «despido injustificado» y se dotará de contenido el derecho a una vivienda digna con «obligaciones concretas» del Estado para los desahuciados. Además se mejorará la protección a la familia con especial atención a la conciliación.
La Constitución que quiere el PSOE es la de «las personas» como sujetos de igualdad y no discriminación, no de «los españoles» como se desarrolló en la Carta Magna hace 37 años. En este sentido, propone incorporar una regulación expresa de igualdad entre hombres y mujeres, extensible a la igualdad en el trabajo y «al derecho de las mujeres a su salud y a su vida, a la protección frente a la violencia de género, a la libertad de decidir sobre sí mismas (aborto), al desarrollo de una educación en valores cívicos y en igualdad, libre de sesgos de género, y a la participación política».
Se acabará con la preferencia del varón sobre la mujer en la sucesión a la Corona y se suprimirá el artículo 15, que todavía recoge la pena de muerte en tiempo de guerra. Los socialistas quieren actualizar y consolidar «el principio de laicidad, incluyedo el sometimiento de los representantes públicos al principio de neutralidad religiosa en sus actuaciones». Y reconocer los derechos vinculados con la bioética.
También abogan por incluir el llamado «derecho al olvido» de las personas en los archivos públicos y en la red, reconocer el derecho de matrimonio entre personas del mismo sexo y «fortalecer» el derecho de asilo.
Primarias constitucionales
En cuanto a la mejora de la calidad democrática, la principal novedad estriva en que el PSOE quiere que la Constitución establezca «la exigencia de participación de los afiliados a los partidos políticos en la elección de sus dirigentes y de sus candidatos a las elecciones» (primarias); más «transparencia» financiera en los partidos y «representación equilibrada entre hombres y mujeres» en candidaturas.
Busca también limitar el aforamiento de parlamentarios y miembros del Gobierno a los casos relacionados con el ejercicio del cargo y suprimir la inmunidad parlamentaria. Además, se incrementará la «proporcionalidad» del sistema electoral (Ley D´Hont) y se desbloquearán las listas.
Asimismo, los cargos institucionales se cubrirán con un sistema de «vacantes a cubrir» mediante valoración de un «comité asesor de composición profesional variable».
