Primer capricho de Santi Potros en libertad: de comilona en una sociedad gastronómica

A pesar de haber estado casi la mitad de su vida entre rejas, el etarra Santiago Arróspide, Santi Potros , no ha perdido las buenas costumbres y el primer capricho que se ha dado después de salir esta mañana de la prisión de Topas ha sido ir hasta su localidad natal, Lasarte, y ha acudido directamente a una sociedad de la localidad , donde sus familiares y amigos le han ofrecido una comida que se ha extendido en una distendida sobremesa. Potros se retiró del local a las 18:30 horas.

Sólo una hija del etarra, acompañada de una nieta, se ha acercado hasta los medios de comunicación y con fuerte acento francés ha explicado que lleva tiempo sin ver a su padre.

La sociedad es un local privado, por lo que no se conoce qué ha sucedido en su interior, pero sí que desde la calle se han podido escuchar risas, gritos de alegría y «Goras», palabra en euskera que significa «Viva». En el exterior, una pintada a favor de las Herrikos Tabernas, los bares de la izquierda abertzale y un grafiti en el que se ve a una niña cacheando a un policía.

Durante la sobremesa, que a media tarde todavía continúa, han salido del local distintos amigos y familiares del etarra. La mayoría ha ignorado la presencia de los medios de comunicación, aunque alguno sí que ha hecho gestos de desagrado hacia los periodistas . Incluso una asistente a la comida se ha dedicado a hacer fotos de los medios de comunicación.