El PP ve a Sánchez «desesperado» por seguir en La Moncloa y por eso lanza un «ultimátum»

El Partido Popular ha recibido con escepticismo el amago de Pedro Sánchez de convocar elecciones generales para el 14 de abril , si los independentistas no le apoyan los Presupuestos Generales del Estado esta semana. Fuentes populares no ven más que un intento de presión del presidente socialista a sus socios separatistas. La vicesecretaria de Comunicación, Marta González , ha señalado que el PP estaría encantado de que la convocatoria de elecciones se haga cuantos antes. «Estamos preparados», ha subrayado. El PP quiere elecciones «cuanto antes», porque «ya tardan» en convocarse.

González se ha preguntado si es una amenaza para los independentistas: «Es posible, porque el Gobierno está desesperado, y se ve teniendo que convocar elecciones. Ve que se puede acabar La Moncloa y todas sus prebendas, y no quiere convocar, pero quizás se vea obligado a hacerlo. Parece un ultimátum a la desesperada ».

El Comité de Dirección del PP ha analizado el «rotundo éxito» de la concentración en Colón : « Decenas de miles de personas salieron a las calles para rechazar las cesiones de Sánchez al independentismo y reclamar elecciones cuanto antes». «Fue una manifestación multitudinaria, respetuosa, pacífica y clara. No ha habido ni un solo altercado ni conflicto», ha destacado Marta González.

El PP ha abierto una página web (www.yovoy.pp.es) para que continúe el «espíritu de Colón» y para «agradecer la participación» e informar de las iniciativas que se vayan tomando en defensa de la Constitución y la unidad de España.

Los populares creen que ese clamor debe ser seguido de una convocatoria inmediata de elecciones . Sin embargo, ha recordado Marta González, la vicepresidenta ha tachado de inconstitucional a la oposición. «Pedro Sánchez es consciente de que debe dar explicaciones de por qué ha aceptado algunas exigencias de los 21 puntos de Torra, como la mesa de partidos y los mediadores».

Los populares no descartan «absolutamente nada» , en el ámbito parlamentario y en las movilizaciones en la calle, para mantener el «espíritu de Colón». Respecto a las críticas al manifiesto que se leyó en Colón, González ha explicado que Sánchez aceptó recoger un documento de 21 propuestas descabelladas y demenciales, y empezó a negociar sobre esos 21 puntos.