El guardia civil que detuvo a Bernardo Montoya en 1995

Emilio Díaz Moreno tenía 42 años y estaba al frente del equipo de homicidios de la Policía Judicial de la Guardia Civil el día que detuvo al autor de la muerte de una mujer de 82 años llamada Cecilia, que había aparecido muerta a cuchilladas en su casa. El arrestado no era otro que Bernardo Montoya , el asesino confeso de la joven Laura Luelmo en El Campillo (Huelva).

«Te voy a matar cuando salga de la cárcel», le amenazó entonces Montoya a Díaz Moreno, según recuerda el agente, ya jubilado, al «Diario Sur». «Era una persona fría», recuerda el exjefe de homicidios, que detuvo a Montoya en 1995. «Cuando una persona mata a otra y no tiene remordimientos es factible que vuelva a hacerlo. Como ha pasado».

Cuando se conoció la desaparición de la joven profesora zamorana y salieron a la luz los nombres de los hermanos Montoya , Díaz Moreno no tuvo dudas. «La chica está muerta y puede haber sido Bernardo», dijo este expolicía extremeño a su entorno.

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