El Rey pide una recuperación sensible y atenta «con quienes peor lo han pasado»
«El aislacionismo no es una buena opción» advierte Don Felipe quien subraya que los derechos y libertades «deben prevalecer frente a cualquier amenaza»
Don Felipe defiende «la cooperación frente a la confrontación» como valor que define a la sociedad occidental, en un momento en que la crispación domina la escena política y los puentes que existían en otras legislaturas entre Gobierno y oposición están prácticamente rotos.
Ante todos ellos pidió que la recuperación económica que no de la espalda a la población más golpeada por la pandemia. Recordó que la crisis provocada por el Covid-19 «nos ha golpeado de manera desigual» y ha reclamado una reactivación en la que «seamos especialmente sensibles y atentos con quienes peor lo han pasado».
Sobre la actual crisis también habló Calviño quien ensalzó, con Rajoy en primera fila, que la estrategia para afrontarla está siendo «muy diferente» a la utilizada por el gobierno popular. Así, destacó la atención puesta esta vez en salvaguardar el tejido productivo, las rentas de las familias, el empleo y la estabilidad financiera.
El discurso del Monarca también incluyó una reivindicación clara de los derechos y libertades de los que disfrutamos en cuanto a «seguridad, convivencia y oportunidades». Su conquista, ha dicho, «debe prevalecer frente a cualquier amenaza que pueda poner en riesgo lo que tanto costó alcanzar». «No podemos permitir que se asiente una percepción accidental o coyuntural de esas conquistas», ha señalado el Rey, advirtiendo que es ahora «cuando más debemos hacer para defender la libertad y los valores que nos han permitido la democracia».
Don Felipe analizaba así la erosión del multilateralismo, el retorno de las tendencias proteccionistas, la desinformación, la volatilidad del orden internacional o del decaimiento de los valores tradicionales, antes de pedir «un reforzado y más eficaz enfoque multilateral» en el que ha considerado «esencial» el fortalecimiento del vínculo atlántico. «El nacionalismo y el aislacionismo no son una buena opción», ha remachado.
En este marco, el Monarca ha puesto en valor el papel de Iberoamérica «como actor necesario a tener en cuenta en el nuevo orden geopolítico» y ha considerado que España y Portugal están obligados a ser «proactivos en un diálogo fructífero que apoye y consolide instituciones democráticas y sociedades abiertas».
La UE, a la altura
En cuanto a la evolución de la pandemia, el Rey ha querido dirigir una mirada positiva recordando como la segunda edición del Foro La Toja , celebrada el año pasado, la incertidumbre era muy superior a la actual. «Hay motivos de inquietud pero también de esperanza» ha señalado, poniendo como ejemplo la vacunación masiva aplicada en España. «Ahora podemos encarar con más optimismo -no exento de la obligada prudencia- el fin de la crisis», contando con «el apoyo decidido de la UE ». Según Don Felipe , la Unión «ha sabido estar a la altura del reto planteado».
Noticias relacionadas