La oleada de ocupaciones preocupa a los vecinos afectados

Veinticuatro horas de pesadilla okupa en una casa de Madrid, acababan con la intervención de la policía. Pero con el desalojo no ha llegado la tranquilidad para los propietarios. La okupa ha interrumpido horas después una entrevista en  directo con la  dueña para reprocharle su versión. Un acoso que provoca la intranquilidad de la propietaria. Hartos de la situación, los vecinos de Segur de Calafell han conseguido desocupar un chalet ocupado horas antes por una pareja. Es una de las muchas viviendas ocupadas en una  urbanización de chalets de ese barrio. El Ayuntamiento de Calafell intenta atajar el problema cortando luz y agua. Tiene pendiente hacerlo en 300 casas.-Redacción-