La mujer de Pedro Sánchez y sus dos hijas viajaron al FIB en coche
El viaje en avión presidencial, asunto ya de altos vuelos, pone a Pedro Sánchez en un aprieto, y...
El viaje en avión presidencial, asunto ya de altos vuelos, pone a Pedro Sánchez en un aprieto, y eso que su esposa, Begoña Gómez, y sus dos hijas, de 11 y 13 años, no se subieron al avión. Viajaron al festival de Benicàssim por carretera y regresaron a Madrid por el mismo medio, quizás por prudencia, anticipando el aluvión de críticas. En otros países, los cónyuges asumen el coste del vuelo en avión oficial. Es el caso del marido de la canciller alemana, Angela Merkel, que a veces opta por la línea comercial porque le resulta más barato. Pero que Sánchez fuera solo, no le sirve a la oposición, que exige explicaciones al presidente con una bateria de preguntas en el Congreso y en Senado. Consideran que fue un viaje de ocio y quieren que el Gobierno detalle el coste económico del desplazamiento y el combustible que se gastó y Ciudadanos, preocupado por el impacto ambiental, pregunta además por la huella de carbono generada. El PP valenciano va más allá y le exige ya a Sánchez que devuelva el dinero gastado.