Movilización a la baja del soberanismo a las puertas del juicio del 1-0

La «huelga política» del día 7 pierde fuelle y la ANC pincha en su movilización

Llegada de los presos independentistas acusados de rebelión a la prisión de Soto del Real EP

Aunque parte del independentismo plantea la celebración del juicio del 1-0 como una oportunidad para una nueva gran movilización popular –el «momentum» con el que Quim Torra especula para intentar una nueva DUI– lo cierto es que el soberanismo da muestras de estar perdiendo fuelle . De entrada, el retraso de una semana sobre la fecha de inicio del juicio en el Tribunal Supremo ha hecho que muchas de las convocatorias previstas para esta semana hayan quedado desdibujadas, empezando por la «huelga general política» impulsada para el jueves por el sindicato independentista la Intersindical –central dirigida por el exterrorista Carles Sastre– y que se quería hacer coincidir con el inicio del juicio.

La huelga, como en anteriores «paros de país», está justificada por razones laborales pero tiene una evidente motivación política -algo prohibido en España- que ayer mismo volvió a denunciar la patronal Fomento del Trabajo. Como en anteriores movilizaciones, la Intersindical hace de paraguas legal para amparar un paro que ninguna de las centrales mayoritarias secunda y que está pasando absolutamente desapercibido en los centros de trabajo.

Aunque la ANC, ERC y el PDECat han explicado que apoyan el paro, la percepción de que la convocatoria va camino del pinchazo ha hecho que se hayan tomado ciertas distancias. Solo el fantasmagórico Consejo por la República impulsado por Carles Puigdemont desde Waterloo (Bélgica) salió ayer a reclamar un «seguimiento masivo» en la huelga.

Descuelgue

Como en anteriores ocasiones, la previsión es que sea en la administración donde pueda darse algo de seguimiento, quizás también en la educación, aunque en los centros esco- lares el ambiente de huelga es más bien nulo. Allí, a los sindicatos educativos afines a la causa soberanista (la propia Intersindical, Ustec y CGT) se han sumado también el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans y la plataforma Universitats per la República en apoyo al paro.

«Querían sacar pecho y apoyar una huelga política para expresar su apoyo al procés y ahora tendrán que hacer el paro, con lo que implica, sin arropar simbólicamente el inicio del juicio. Les ha salido mal», precisaron a este diario fuentes del sector educativo. Los sindicatos CC.OO., UGT y Usoc, por su parte, tuvieron claro desde un principio que no secundaban la huelga política. Algunos como Comisiones empezaron, por su parte, acciones reivindicativas (mesas redondas, conferencias...) la semana pasada y seguirán esta semana, aunque «todos los actos convocados tienen como base reivindicaciones relacionadas con el sector educativo», según precisaron a ABC portavoces de este sindicato.

A la huelga del próximo jueves la Assemblea Nacional (ANC) debía añadir toda una serie de acciones reivindicativas en distintas capitales europeas y que ahora se han movido a la próxima semana. Las convocatorias llegan después de que la ANC ocupara durante varias horas la semana pasada la delegación de la Comisión Europea en Barcelona, algo que causó cierto estupor en sectores independentistas. La deriva radical de la ANC no parece tampoco que vaya a tener gran seguimiento. La protesta que durante esta semana de 9 a 21 hs ha convocado ante el Palau de la Generalitat para exigir al Govern que implemente la república apenas reunió a una decena de personas.

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