La marcha nórdica mejora las secuelas del covid persistente

La marcha nórdica le ha dado a Rosario el impulso que necesitaba para avanzar en su recuperación. Tiene 50 años y es técnico en enfermería. Asegura que cuando empezó con las clases se tropezaba con los palos y ahora ha mejorado mucho su equilibrio. Rosario pasó el coronavirus en la primera ola pero la enfermedad le dejó secuelas. Ella es una de las profesionales del Hospital del Mar que participan en una prueba piloto para comprobar los efectos de este deporte en pacientes con covid persistente. La comunidad cientifíca tiene evidencia sobre los beneficos de este ejercicio en otras patologías y ahora se ven los resultados en ese 10 % de pacientes que tras superar la infección se les diagnostica covid persistente.