Malestar en la Guardia Civil por la excesiva exposición mediática

Tras lo ocurrido, se ve lejano que el Gobierno decida prescindir de los técnicos de uniforme en las ruedas de prensa

CCoronavirus en España, últimas noticias y datos en directo

Fotografías de niños muertos por una vacuna contra el Covid-19, musulmanes autorizados para moverse en el Ramadán, alcaldes que permiten celebrar romerías, calendarios falsos con las fechas de salida del confinamiento... Nada escapa a la fábrica diaria de bulos y noticias falsas que inundan las redes sociales más seguidas . Algunas están afectando a organismos oficiales, desde Ayuntamientos a centros de salud, y todas extienden el pánico y la desinformación. No están tipificadas como delitos y, por tanto, Guardia Civil, Policía y el resto de Cuerpos se limitan a detectarlos y desmentirlos a través de sus redes.

La polémica surgida tras las palabras del jefe de Estado Mayor de la Guardia Civil, el general Santiago, tiene su origen en una instrucción enviada a todas las Comandancias y unidades de investigación para elaborar un informe sobre ciberdelincuencia y sobre noticias falsas. El autor del mail es el teniente coronel Juan Salom , jefe de la Unidad de Coordinación de Ciberseguridad del Cuerpo, dedicado a la ciberdelincuencia desde hace una década.

Fuentes de la Guardia Civil consultadas por ABC insisten en que esa instrucción de la que echó mano Santiago en la ronda de preguntas era de «consumo interno». Pero entienden que tanto la redacción del mensaje que se refería a «instituciones del Gobierno» en lugar de a «instituciones del Estado» como la explicación del general, que no hizo alusión a él y habló de «minimizar críticas», fueron «desafortunadas». Hasta ahí. El resto, dicen, es «utilizar a la Guardia Civil para dar un puntapié al Gobierno».

No obstante, estas fuentes que alaban la trayectoria y el peso del jefe de Estado Mayor del Cuerpo sostienen que lo ocurrido es consecuencia del desgaste al que está sometido y critican la excesiva exposición a la que están sometidos. «No es normal que un general tenga que dar cuenta de robos de naranjas, por ejemplo. Si quieren que aparezcan los técnicos deben limitarse a informar del número de detenidos y sancionados. Lo demás, sobra», señala un alto mando de la Guardia Civil.

«Nosotros no estamos preparados para esta pelea. El que sale ahí no tienen nada que ganar y sí mucho que perder como se ha visto. El general externamente está fuerte, pero muy dolido por lo que ha pasado y por el daño involuntario a la institución», añade otro responsable del Cuerpo. Tras lo ocurrido, se ve lejano que el Gobierno decida prescindir de los técnicos de uniforme que era la intención previa a la última crisis de comunicación.

Reiteran, a continuación, que la preocupación por los bulos no es baladí. En poco más de una semana, el Instituto Armado ha reportado una quincena de estas falsedades relacionadas con el coronavirus que tienen en común supuestos tratamientos de la enfermedad, pacientes a los que no se atiende, muertes de ancianos e incluso niños y fin del confinamiento.

Algunos ejemplos: una foto de un grupo de personas reunidas frente a los cuerpos sin vida de siete niños, junto a un texto que asegura que habían muerto tras hacerles pruebas con una nueva vacuna contra el Covid-19. Un supuesto comunicado oficial con los sellos del Ayuntamiento de Madridejos (Toledo) y de una parroquia, donde se informa que se ha aprobado la celebración de la romería. Y una estadística publicada en Twitter para corroborar que los fumadores tienen menos posibilidades de ser hospitalizados por coronavirus. Todo cabe en un «fake».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación