Una lluvia de rocas volcánicas obliga a buscar refugio a un equipo de INVOLCAN
Las explosiones provocan una lluvia constante de piroclastos. Las partículas de magma se...
Las explosiones provocan una lluvia constante de piroclastos. Las partículas de magma se enfrían rápidamente y se convierten en proyectiles afilados que en caso de impacto pueden derribar el drón cuando se acerca demasiado. Las altas temperaturas puden fundir sus hélices pero el riesgo es real también para los científicos que trabajan sobre el terreno aunque estén más aleados. Un equipo del INVOLCAN ha tenido que refugiarse para evitar ser alcanzado por la multitud de piedras que arroja el cono. El casco no es suficiente para protegerse . Cuando son tan grandes los vulcanólogos las llaman bombas y el sonido recuerda al de un bombardeo.Afortunademente han salido ilesos pero es evidente el peligro al que se exponen .