Limpieza entre la desolación en Los Alcázares

Entre muebles apilados en las calles de Los Alcázares nos encontramos el local de Rocío, quien no sabe por dónde empezar a limpiar. Es la segunda vez que su centro de estética acaba en la ruina por una riada de estas dimensiones. Siguiendo los escombros llegamos al bar de Santiago, destrozado. Mientras los militares siguen trabajando en la localidad, Jorge nos abre la puerta de lo que era su hogar. Cepillo en mano, nos asegura que los daños son incalculables La desolación también se coló en el sótano de Gregorio, embarrado. Todos agradecen el trabajo de los grupos de voluntarios llegados de todas partes. En especial a Patricia y sus vecinos de El Algar, una localidad próxima. Han reunido comida y mantas para los más necesitados. Su solidaridad empieza a aclarar el futuro de Los Alcázares.