Juzgan en Mallorca a un hombre por abusar de su hija desde los cinco hasta los diez años de edad
La Fiscalía pide 25 años de prisión y una indemnización de 50.000 euros por las graves secuelas sufridas por la víctima
La Audiencia Provincial de Palma acogió este miércoles el juicio contra un hombre acusado de dos delitos de agresión sexual contra su hija, uno de ellos continuado. Los abusos se habrían iniciado en 1999 —cuando la víctima tenía cinco años— y habrían proseguido hasta 2004. Según la Fiscalía, el padre de la niña habría abusado de ella, l a habría violado y la habría atado a la cama de manera reiterada a lo largo de esos cinco años.
El Ministerio Público solicita para el acusado una pena de 25 años de prisión y una indemnización de 50.000 euros por las graves secuelas provocadas por dichas agresiones. Los hechos habrían tenido lugar en el antiguo domicilio familiar, ubicado en la población menorquina de Ciutadella.
Por su parte, la defensa del sospechoso pide la libre absolución de su cliente , al considerar que no habría cometido dichos delitos. «Nunca haría daño a mis hijas, nunca les he hecho daño», afirmó el inculpado ante el tribunal. Asimismo, señaló que en aquel periodo de tiempo él estaba viviendo en el Reino Unido , por lo que no podría haber cometido los delitos que se le atribuyen.
Según su versión, la denuncia presentada en su momento sería la respuesta al hecho de que durante años se desentendió económicamente de su familia . El acusado, de nacionalidad española, se encuentra en estos momentos en la cárcel. El juicio ha quedado ya visto para sentencia.
Un hecho a destacar vinculado a este proceso es que los abusos no sólo habrían sido llevados a cabo por el progenitor de la niña, sino también por un tío suyo, ya fallecido. Años después de esos hechos, fue el nuevo compañero sentimental de su madre quien abusó de la menor . En ese caso concreto, la Justicia condenó ya a ese hombre a seis años de cárcel.
La víctima, que en la actualidad es ya mayor de edad, declaró ante el tribunal a través del sistema de videoconferencia . Durante su comparecencia, la joven afirmó visiblemente afectada que su padre tenía relaciones sexuales con ella y que también la ataba.
Según explicó en el juicio la psicóloga que trató a la víctima durante más de un año, entre las graves secuelas sufridas por ella se encuentran las de estrés postraumático, así como trastornos de ansiedad, sueño y alimentación . Tanto el fiscal como la especialista coincidieron en destacar el recurrente uso de prácticas sádicas por parte del progenitor de la niña.
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