Opinión
El juicio se embarra
Los abogados de los inculpados se han esforzado esta mañana en minar la credibilidad de Daniel Baena, el teniente coronel de la Guardia Civil que actuaba como jefe de la policía judicial de Cataluña. Primero, le intentaron endosar la titularidad de una cuenta de Twitter. Baena negó cualquier relación. Y luego el letrado Van den Eynde centró su estrategia en intentar demostrar que las investigaciones partieron de un fin predeterminado, que era criminalizar al independentismo. Pero el teniente coronel se defendió bien, enfatizando que todas las actuaciones de la policía judicial iban encaminadas a examinar conductas concretas bajo la existencia de sospechas de posibles delitos. Una sesión áspera que corrobora que la estrategia de los abogados, que no discuten los hechos, es cuestionar el procedimiento y sugerir la idea de que fueron víctimas de una persecución política. Parece difícil que el tribunal compre esta tesis, pero lo sucedido esta mañana da idea de por dónde va a discurrir el juicio en los próximos días.
