El impactante cambio de imagen del acusado del 'crimen de los tirantes'

Desde hoy se sienta en el banquillo Rodrigo Lanza, el único acusado por el llamado 'crimen de los tirantes'. Su imagen de hoy, la de un joven clásico, dista mucho del aspecto que lucía hace dos años cuando ingresó en prisión con cabeza afeitada, coleta, piercings y dilatadores en las orejas. Todo sucedió en diciembre de 2017. Lanza entró a un local de copas de Zaragoza donde se encontró a Víctor Laínez, de 54 años. Ataviado con unos tirantes con la bandera de España, Laínez llamó la atención del joven chileno y ambos comenzaron una discusión en el bar que acabó con la muerte del Víctor, 4 días después, por los fortísimos golpes recibidos. La acusación sostiene que fue Rodrigo quien comenzó la disputa llamándolo facha y fascista, y que lo agredió, y asesinó, por su posicionamiento político. La defensa, que pide la absolución, mantiene lo contrario. Que fue Laínez el que empezó la discusión diciéndole que se fuera a su país y que Lanza, bajo los efectos del alcohol, solo lo agredió en defensa propia cuando el hombre se acercó a él con una navaja.  La fiscalía pide para el acusado 25 años de prisión por un presunto asesinato por odio, con ensañamiento y alevosía. - Redacción-