La ilusión cambia de bando
Podemos pierde apoyo en la medida que la indignación surgida en el 15-M se diluye
La ilusión por las encuestas cambia de bando, los que hasta hace un mes las criticaban ahora las alaban, y viceversa. Unos y otros deberían tener presente seis consideraciones clave. Uno: se trata de estimación de voto al Congreso cuando la próxima cita es con las urnas municipal y autonómica donde el peso de los candidatos es determinante. Las alcaldesas de Madrid y Barcelona, por ejemplo, mejoran el apoyo a su formación. Dos: el actual gobierno está conformado para optimizar resultados en esa cita electoral. Prueba de ello es que, por primera vez en la historia de España, el jefe de gabinete del presidente no es un tecnócrata del partido sino que se ha externalizado en un consultor de comunicación: prima la comunicación sobre la gestión. Tres: los ejes ideológicos (izquierda-derecha) o identitario (nacionalismos) son insuficientes para explicar el voto, el eje nuevo-viejo partido sigue operando con fuerza. Los cuatro principales partidos seguirán siendo determinantes en la política española. Cuatro: Podemos pierde apoyo en la medida que la indignación del 15-M se diluye, mientras que Ciudadanos y los partidos nacionalistas catalanes aguantan pues la indignación del procés sigue vigente. El reciente libro «Del 15-M al Procés» del senador socialista Oscar López lo analiza a fondo. Cinco: el Partido Popular tiene poco margen para batallas internas pues su votante las interpreta como otra forma de corrupción al poner los intereses personales por encima de todo. Y seis: la recuperación electoral del PP sólo vendrá si la renovación de liderazgos es exitosa.