Iglesias pide seguir como perjudicado en el caso Villarejo porque consta el intento de «desacreditarle»
Alega que «ajenas a otras consideraciones» como el destino que tuvo la tarjeta de memoria, es un hecho que las publicaciones iban en su contra
La defensa del vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias ha presentado un recurso ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional para solicitar que se le mantenga como perjudicado en el caso Villarejo, del que fue expulsado por auto del pasado 25 de mayo , porque «más allá de cualquier reflexión» sobre el destino que tuvo la tarjeta del móvil sustraído a su asesora Dina Bousselham, consta en actuaciones que su contenido se publicó en un intento de «desacreditarle» .
El escrito, avanzado por El Confidencial y al que ha tenido acceso ABC, se centra en la retirada de la condición de perjudicado y no entra a rebatir los indicios de delitos de daños informáticos o revelación de secretos que en el mismo auto apreciaba el juez Manuel García Castellón, tras apreciar que tuvo en su poder varios meses la tarjeta de memoria sustraída a Bousselham sin decirle nada al respecto y a sabiendas de que contenía información personal. Además, según declaró ella en un principio, aunque esta semana se ha retractado , Iglesias, en una fecha aún por determinar le habría devuelto el dispositivo averiado.
«Más allá de cualquier reflexión sobre la tarjeta obrante en las actuaciones, de la posesión de la misma, y la cadena de custodia respecto de ésta, dicha circunstancia no impugna en forma alguna que conste indiciariamente acreditado la existencia de los archivos creados en diciembre de 2015 como recoge el informe policial de fecha 13 de enero de 2020 y cuyas capturas de pantalla contenidas en esos archivos, son idénticas a las publicadas», expone la defensa de Iglesias, en relación al material encontrado a Villarejo.
Va así al núcleo de esta pieza de la causa, la número 10, que se abrió después de que los investigadores encontrasen en los archivos del comisario jubilado y en prisión provisional José Manuel Villarejo un volcado del móvil de Bousselham cuyo robo ella había denunciado en noviembre de 2015. En esos archivos había una serie de pantallazos de conversaciones de chats de Podemos en los que Iglesias no quedaba en buen lugar y que fueron publicados por un diario digital en julio de 2016 y pasaron al menos, por otra redacción.
Fue esa publicación la que le valió la condición de perjudicado, pero el juez, a instancias de la Fiscalía Anticorrupción, acordó retirársela una vez se puso de manifiesto que la propia Bousselham hacía pantallazos de las conversaciones de grupo y los compartía con terceros, es decir, que el origen de la publicación podría no estar en el delito de robo del teléfono.
«Es claro que con independencia de que el contenido tuviera origen en el móvil inicialmente sustraído y de que hubiera más participantes en el chat, también perjudicados por la publicación sin su consentimiento de contenidos pertenecientes al ámbito privado, las noticias, en su mayoría, apuntan a las manifestaciones que ha realizado mi representado, con el claro objetivo de desprestigiar su imagen, en momentos electorales clave», apunta en este sentido la abogada de Iglesias.
Incide además en que «a día de hoy, de las diligencias practicadas, no se ha podido probar aún que el robo del móvil de Doña Dina fuese un hecho casual o una actuación deliberada, encaminada a obtener información sensible, privada e íntima» sobre Pablo Iglesias «a los efectos de perjudicarle políticamente». «Sin que pueda descartarse esa hipótesis no resulta procedente que el Sr Iglesias pierda su condición de perjudicado en este proceso de forma directa», argumenta su letrada.
«Intoxicación informativa»
En este sentido, recuerda que como ya justificó ante el juzgado, justo antes de que se produjera el robo del móvil se publicaron informaciones que relacionaban sentimentalmente a Iglesias con la que ejercía como su asesora en el Parlamento Europeo, lo que en su opinión, lleva «indiciariamente, al menos» a «la convicción, de que el robo del móvil, no tenía otro objeto que el de obtener información sensible para perjudicar al señor Iglesias».
Suma además el hecho de que esta macrocausa, denominada Tándem, investiga una organización criminal que habría estado liderando Villarejo, quien «presuntamente recibía 'encargos'» entre los que estaría el despliegue de «maniobras de intoxicación informativa, e inclusive en algunos casos creación y difusión de campañas mediáticas de desprestigio».
«Dada la correlación de fechas y de indicios citados, presumiblemente, todas las actuaciones ocurridas desde el robo del móvil, pasando por el informe PISA, hasta la difusión en los medios del contenido del móvil de Doña Dina, tienen una clara correlación con hitos electorales, siendo gravemente perjudiciales para Podemos y sus miembros, particularmente el Sr Iglesias , las publicaciones que realizan los medios de comunicación», añade.