Girauta: «El tránsfuga es el partido. El ideario que se está defendiendo ahora es el contrario al de Cs»
Una de las personas más cercanas a Albert Rivera, ex portavoz y dirigente del partido, hoy colaborador de ABC, plasma en esta entrevista sus opiniones sobre la situación del partido tras una crisis que lo deja en extrema debilidad.
-Lo veo con ganas de haberse empadronado en Madrid para votar el 4 de mayo
—Sí, todos estamos pendientes de esos resultados. Se han producido en unas circunstancias imprevisibles. Ayuso es la gran esperanza de los que queremos que el sanchismo se acabe lo antes posible. Ha marcado un camino distinto en la lucha contra la pandemia. Y su enfoque en cuestiones ideológicas sirve de guía a todos.
-¿En qué lugar deja esto a Casado?
—Esta pregunta va a a ser decisiva. Casado puede ser un líder de verdad, que está encantado cuando le rodean personas que valen mucho. O un líder falso, que se sabe en falso y le incomoda el talento a su alrededor. No sabemos todavía qué tipo de líder es Casado.
-Y sobre esta duda, ¿qué le parece el cese de Ávarez de Toledo?
—No es una cuestión cómoda para mí. Yo tengo un gran cariño a Cayetana. Y la admiro mucho intelectualmente. Pero yo también he sido portavoz parlamentario de un partido. No tiene que mentir, pero tampoco tiene que decir siempre lo que piensa. Yo no recuerdo haber mentido. Pero sí recuerdo como una cosa muy habitual morderme la lengua.No me sirve como ejemplo de mal liderazgo de Casado.
-¿La candidatura de Edmundo Bal no le hace cambiar de opinión?
—Para nada. Con todo mi respeto a Edmundo Bal.
-¿Pero es mejor que Aguado? ¿Puede haber gente que se lo piense?
—Es que no creo que Cs tenga la más mínima posibilidad en Madrid. ¿Y que pueda optar por Gabilondo o Ayuso en base a unos criterios que nadie conoce? Es mejor asegurar que sea Ayuso.
-¿Por qué sucedió lo de Murcia?
—Es una enorme estupidez estratégica. Es un gravísimo error, propio de aprendices de brujo. Gente que no tiene la menor idea de lo que hace. No tiene sentido político.
-¿Hay un transfuguismo o no?
—Es un episodio que no se puede comparar con ningún otro. Un partido que tiene una tesis fuerte: acabar con el sanchismo. Y que de pronto toma una decisión contraria a la tesis fuerte. ¿Quién es el tránsfuga aquí? El transfuga es el partido. Que coge un legado heróico y lo prostituye. ¿Tiene sentido que de seis, tres rechacen una moción contra el Gobierno en el que ellos mismos estaban? Sí ¿Prima la fidelidad institucional o partidista? Siempre la institucional. La institución siempre es más importante que el partido. Por cierto, mucho cuidado con esta acusación gratuita a la gente que se marcha Cs diciendo que le dan dinero. Eso han dicho varias veces. Hablando de dinero, que tengan cuidado.
-La dirección defiende que la V Asamblea refrendó esa estrategia de pactar a izquierda y derecha. Y que el veto ya se había levantado el 10-N
-Una cosa es decir en abstracto que un partido puede pactar a derecha y a izquierda y otra cosa es decir en concreto que Ciudadanos puede pactar con el PSOE de Sánchez. Que es el PSOE de la mesa de negociación con los separatistas, es el PSOE de la preparación de los indultos, algo que alimenta un nuevo golpe de estado. Y es el PSOE del blanqueamiento de Bildu, y por tanto de la ETA. Ese PSOE no es un PSOE abstracto. Y hay un punto crucial: lo de que se abrió la puerta a pactar con Sánchez en la última campaña. Eso ha sido reconocido por Albert como un error. Que lean su libro. Había que haberse mantenido en lo que nos había dado 57 escaños. Yo vi las encuestas. Vi cómo al abrir la mano caemos en las encuestas. Que no usen el nombre de Albert en vano. El ideario que se está defendiendo ahora es el contrario al de aquel partido
-Pero sí hubo un tiempo en que Ciudadanos defendió esto
—Eso corresponde a un momento histórico que no tiene nada que ver con el actual. Eso es como reprocharnos del pacto del abrazo. ¿Qué antecedente había? ¿Qué se sabía de Sánchez? Entonces decía lo mismo del nacionalismo que nosotros. Lo mismo es lo miso. Y fue la mar de fácil pactar con ellos un programa de Gobierno. Porque Sánchez decía lo que queríamos oir. La primera vez que te hacen eso no piensas que es mentira. Eso lo piensas cuando le has visto decir una cosa y su contraria varias veces.
-¿Qué hacer con 10 diputados?
—Nada. Por eso algunos nos fuimos. No se podía hacer nada de lo que queríamos. Pero me parecía normal que se administrara eso de la mejor manera posible. Por eso yo no solté el carnet, yo me fui de la Ejecutiva. Ahora de repente se han inventado que ese partido nació para ser una bisagra. ¿Pero qué me cuentas de lo que era o no era? Yo lo que sé es para que hicimos la expansión nacional y qué queríamos hacer desde 2012: alcanzar la presidencia del Gobierno.
- «Viva la foto de Colón», dice usted. Y hay quien dice que eso es lo que hundió a Cs
—Quien diga eso no sabe de lo que habla. Es lo que nos dio 57 escaños. Que se sitúen en el calendario. Esto tiene que ve con los complejitos de una gran parte de la derecha. Es lo de «yo no me puedo fotografiar al lado de Santi Abascal». ¿Cómo que no? ¿A quién ha matado Santi Abascal? Es un señor honorable y por supuesto que me voy a fotografiar con él siempre que haga falta.
-Ciudadanos creció mucho a costa del PP. ¿No habrá ahora orfandad en su electorado?
—Todo depende de Casado. Está en sus manos que suceda una cosa u otra. Pablo cuando habla, ¿quiere recordarnos a Ayuso o a Feijóo? Ahí está todo.
-¿Va a volver Rivera a la política?
—No. Pero tampoco lo veo siempre callado. Sería impensable que no se pronunciase sobre asuntos de interés general. Pero volver a la política profesional no lo va a hacer.