La Fiscalía: «Ausbanc y Manos Limpias generaban miedo para ganar dinero»
El Ministerio Público defiende que toda la investigación fue legal, al margen del comisario Villarejo
El fiscal de la Audiencia Nacional José Perals ha enunciado este lunes sus conclusiones tras un año largo de juicio al presidente de Ausbanc, Luis Pineda; su homólogo en Manos Limpias, Miguel Bernad, y ocho colaboradores y ha pedido que sean condenados por «aprovecharse» del derecho de asociación, de la libertad de expresión y de la figura de la acusación popular para extorsionar durante años con afán de lucro. El modus operandi, conforme resumió, fue siempre el mismo: «Dar miedo. Miedo que generaban para que la gente pagara dinero ».
Y ese miedo tenía distintas formas, tal y como ha detallado a lo largo de cuatro horas de exposición. Por un lado, la extorsión a cajas, bancos y empresas so pena de publicar informaciones negativas. Por otro, la que se ejecutaba previa presentación de denuncias, querellas o impulsos procesales por la vía de la personación en procedimientos en marcha. El más conocido, el caso Noós, donde Manos Limpias sustentó los cargos contra Doña Cristina de Borbón que le acarrearon, en palabras del fiscal, «varios meses de banquillo» sin estar «justificado».
Es sólo uno de la veintena de casos por los que están acusados Pineda y Bernad, así como la abogada de Manos Limpias en Noós, Virginia López Negrete, y distintos miembros de la ejecutiva de Ausbanc, por delitos que van desde la organización criminal al blanqueo pasando por diversas extorsiones que en el caso de Doña Cristina, lo fueron en tentativa, pues no cobraron los 3 millones que, según la instrucción, pedían para retirar la acusación.
Otros sí pagaron, generalmente, en forma de acuerdos de publicidad, conforme ha relatado Perals. « Son hechos muy graves, cometidos a lo largo del tiempo, que han afectado a gran número de personas, que han alterado el normal funcionamiento del mercado libre y las instituciones», apuntó.
Pero antes de pronunciarse sobre cada uno de esos hechos por los que Pineda afronta 116 años de cárcel y Bernad, cerca de 25; la Sala deberá dirimir la nulidad de la causa que ha instado el primero porque entiende que obedece a una maniobra del comisario Villarejo por encargo del BBVA.
Este asunto se investiga en la Audiencia Nacional y Pineda consta como víctima y perjudicado. «Se ha alegado que ha sido todo un montaje policial seguido por todas las entidades de carácter público que han intervenido en este procedimiento y que todo derivaba de una denuncia falsa que en realidad no es falsa, sino anónima», apuntó el fiscal.
Incidió en que fue la Fiscalía quien tras nueve meses de investigación presentó la querella, de modo que «no se dio pábulo, sin más» , a aquella denuncia inicial. Además, defendió el trabajo de los investigadores, pues no hay indicio de irregularidad ni de causa prospectiva y todos negaron «tajantemente» haber sufrido presiones. «Toda la denuncia inicial y todas las diligencias practicadas se producen de acuerdo a la legalidad y la jurisprudencia Supremo» , zanjó.