Acusan a una empleada de UGT de desviar dos millones en 178 cheques para indemnizar a sus amigas
La Fiscalía señala a otras cuatro personas por delito continuado de estafa y falsedad
Alteraba los nombres de los talones, una vez autorizados, y ponía el de su marido y sus colegas
La Fiscalía Provincial de Madrid ha presentado una denuncia contra M. C. T. L., una empleada de UGT que habría desviado a su marido y tres amigas algo más de dos millones de euros que iban destinados a indemnizaciones por despido y así, iban a ser abonados «con cargo a fondos previamente transferidos por el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) « a través de la división madrileña del sindicato. El dinero no había sido aún adelantado por el fondo estatal, de manera que salía de fondos propios de UGT Madrid.
La denuncia, a la que tuvo acceso ABC, se dirige contra ella y otras cuatro personas a las que imputa delito continuado de estafa y otro de falsedad en documento mercantil por hechos que transcurrieron «al menos» entre 2019 y 2021, cuando la empleada, entre cuyas funciones se encargaba la de librar los cheques para las indemnizaciones, estuvo alterando los nombres de los beneficiarios.
La Fiscalía sostiene que ella, « bajo la apariencia de librar cheques en favor de diversos trabajadores que habían sido despedidos y que habían encargado a UGT Madrid que tramitaran su correspondiente indemnización», presentó para su firma a los responsables del sindicato diversos talones cuyo importe iba a ser abonado «con cargo a fondos previamente transferidos al Fogasa».
Según detalla la denuncia, en esos cheques puso como beneficiarios a diversos médicos y maestros que habían superado una fase de oposición y que «aleatoriamente» escogía en listados publicados en Internet sin que tuvieran relación alguna con UGT Madrid ni hubiesen solicitado sus servicios para cobrar indemnizaciones.
178 cheques de fondos de UGT Madrid
Una vez los responsables del sindicato habían firmado el cheque, ella «simulaba» la firma del supuesto beneficiario en el recibí y luego eliminaba «con una goma que borra tinta», el nombre que había puesto y ponía el de personas de su núcleo familiar: su marido y tres amigas que actuaban en connivencia con ella.
En otras ocasiones, además de cambiar la identidad del beneficiario alteraba también la cantidad. En total, son 71 cheques fraudulentos por importe de 372.660,53 euros en 2019, otros 67 talones en 2020 por importe de 407.936,99 euros y un año más tarde, 40 cheques por importe de 1.319.082,50 euros .
El fraude supera los dos millones. No obstante, según el fiscal, «eran fondos propios de UGT Madrid sin que dichas cantidades proviniesen de cantidades adelantadas por el Fogasa».
La denuncia tiene su origen en los hechos que puso en conocimiento de las autoridades el que fue secretario general de UGT Madrid, Luis Miguel López Reillo, quien dimitió el pasado 20 de diciembre tras denunciar ante la Policía una presunta trama interna que podría haber desviado entre 1 y 2 millones de euros.
Poco después de su salida, UGT ya a nivel nacional se dirigió a la Fiscalía de Madrid apuntando a «una estafa contra el propio sindicato» y aclarando, en todo caso, que no existía ningún trabajador externo afectado por la trama al que no se le hubiese abonado lo que legalmente le correspondía con cargo al Fondo de Garantía Salarial, como informó ABC.
Las diligencias se acumularon y la Fiscalía siguió la pista de los cheques. Resultó que 46 de ellos los cobró una de sus amigas, otra recibió 21 y una tercera, «al menos 48». Mientras, su marido y ella cobraron más de medio centenar de aquellos talones que no les correspondían sumando más de 365.000 euros.
