La Fiscalía de la Audiencia Nacional incluye la violencia en Cataluña como amenaza terrorista
Las ramificaciones de la «operación Judascat» centran la respuesta en los juzgados centrales
![Violencia en Barcelona tras la sentencia del «procés»](https://s1.abcstatics.com/media/espana/2020/09/07/protestacdrbarcelonaJaimeGarcia-U51485671408EcB-1248x698@abc.jpg)
El capítulo de la Fiscalía de la Audiencia Nacional que recoge la Memoria Anual de la institución presentada este lunes incluye por primera vez el «movimiento violento independentista catalán» en su apartado sobre terrorismo nacional, donde se analizan las amenazas a la luz de los procedimientos registrados en esta instancia donde cuatro de cada diez asuntos tienen que ver con actividades terroristas.
En una lista sobre «terrorismo nacional» que encabeza ETA y que también incluye, como otros años, el «Anarquismo Insurreccionalista», el Grapo y el «Independentismo Radical Gallego», se cuela por primera vez este año el asunto catalán, a la luz de las nueve detenciones practicadas en septiembre de 2019, cuando se desmanteló el denominado Equipo de Respuesta Táctica de los Comités en Defensa de la República, imputados por «pertenencia a organización terrorista, tenencia de explosivos con fines terroristas y conspiración para la comisión de estragos».
En cuanto al nivel de «amenaza» que este fenómeno de violencia en Cataluña supone, la Fiscalía de la Audiencia Nacional recuerda que a lo largo del año pasado continuaron «produciéndose acciones violentas e intimidatorias del independentismo radical y violento catalán dirigidas contra personas, colectivos e instituciones que se posicionan en contra del proceso secesionista».
El informe del Fiscal Jefe de la Audiencia Nacional señala además las movilizaciones promovidas por la plataforma Tsunami Democràtic desde los días previos al 14 de octubre del año pasado, cuando se dio a conocer la sentencia a los líderes del procés, y que tras el fallo, desencadenaron en « graves disturbios en diferentes ciudades de Cataluña, especialmente focalizados en Barcelona», que incluyeron «la paralización del aeropuerto» de El Prato, cortes de vías de comunicación «y ataques a edificios públicos».
Cadera, Judascat, Apóstolcat y Tadeo
En este sentido, detalla las «actuaciones contra el independentismo violento en Cataluña» y además de detenerse en la mencionada operación contra los ERT, revela la vigencia de las diligencias abiertas por la «Operación Cadera», que «en el marco del delito de terrorismo», investiga «las actividades de los CDR, su estructura y sus relaciones con otros grupos, organismos y/o instituciones que buscan la independencia de la Comunidad Autónoma de Cataluña fuera de las vías constitucionales».
Consta asimismo la «Operación Apóstolcat» que en el Central de Instrucción número 6 investiga «la existencia de una organización clandestina, liderada por empleados públicos catalanes, denominada 'CNI catalán'», cuya presunta existencia ya salió a relucir en la causa sobre los ERT por las referencias de algunos de los luego detenidos a que habrían recibido instrucciones o indicaciones de este grupo.
«Dicha organización estaría dinamizando varias iniciativas tendentes a la desconexión del «estado catalán» mediante la creación/regeneración de estructuras paralelas de estado y de una república catalana digital. Además, serían los encargados de planificar y, llegado el caso, ejecutar ciertas acciones multitudinarias y otras acciones con la finalidad de tomar el control del territorio», detalla la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
Según expone, esta investigación «ha permitido observar y detectar los contactos y reuniones entre distintos sectores del movimiento independentista, de los que se infiere una intensa actividad con el fin de movilizarlos para obtener y mantener el control efectivo del territorio y conseguir la proclamación efectiva de la república en Cataluña».
Por último, refiere otra de las investigaciones en curso sobre este asunto, la «Operación Tadeo», que «indaga en la composición e implicación de un grupo de individuos que habrían sido señalados por la investigación llevada a cabo a raíz de las detenciones de «JUDASCAT» como un segundo núcleo productor de la sustancia denominada Termita» de la que los primeros detenidos, tenían componentes.