La familia de Blanca Fernández Ocho espera poder velar hoy a la deportista
Realizadas todas las pruebas, todavía faltan los resultados del ADN y de los análisis...
Realizadas todas las pruebas, todavía faltan los resultados del ADN y de los análisis toxicológicos, estos últimos podrían tardar varias semanas. Se podrán despejar, entonces, las incógnitas que hay entorno a la muerte de Blanca Fernández Ochoa. Como la duda de si fue una muerte natural o voluntaria. Porque está descartada una muerte violenta accidental u homicida. El cuerpo no tiene traumas o golpes propios de una caída. Está muy deteriorado por el paso de los días. Y el forense apunta a que podría llevar muerta más de una semana. Hasta 10 días. En su mochila Blanca Fernández Ochoa llevaba toda su medicación para la depresión. De hecho eso alertó a la familia cuando lo descubrió. Ahora serán los resultados de toxicología los que ayuden a certificar si hubo una ingesta excesiva. En esa mochila que estaba junto al cuerpo estaban también las llaves del coche y el ticket de su compra el día 24 en un centro comercial: agua y embutido en la charcutería donde la reconocieron. A unos cinco kilómetros del lugar donde aparcó su coche estaba el cuerpo, en posición tumbada. Se encontraba a 200 metros de un sendero, en el límite de la zona arbolada, antes del ascenso a la Peñota, que impedía verla desde el aire, con helicópteros o drones. La familia pudo identificar el cuerpo por un tatuaje en el tobillo y por las pulseras que llevaba con fotografías de sus hijos incrustadas. También la ropa y sobre todo el calzado. Pero no les entregarán los restos hasta no terminar la prueba de ADN.- Redacción-