Falta de comida, de medicación o incluso pérdida de ancianos. Es la denuncia de los familiares de la residencia de Lliria

Reunidos en la puerta de la comisaria con algo en común. Son familiares de los ancianos de la residencia de Lliria. Al ver las imágenes, sentimientos muy parecidos. Un familiar cuenta como su hermana sufrió durante meses  tratos idénticos  a los que reflejan los vídeos grabados por la  extrabajadora y por eso la sacó del centro. Otros casos siguen en la residencia porque tienen una plaza pública, las quejas son constantes. Falta de comida, nulo control de la medicación y hasta cargos en el banco injustificados. Uno de los residentes enfermo de alzheimer  y un vecino lo encontró por la calle a varios kilómetros del geriátrico.  La venta de la residencia a un fondo de inversión, según las familias, aún ha agravado más la situación. Los familiares se organizan para emprender acciones legales conjuntas.-Redacción-