La experiencia antiterrorista de la Guardia Civil se despliega en Irak
Parten a Irak 25 guardias civiles que se dedicarán a formar a policías locales, regionales y de fronteras

Son 25, pero podrían haber sido 170, porque este es el número de agentes de la unidad de elite de la Guardia Civil , los Grupos de Acción Rápida (GAR), que se ofrecieron voluntarios para viajar este viernes a Irak con una mochila cargada de su experiencia en la lucha antiterrorista.
Les ha despedido esta mañana el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido , en la base aérea de Torrejón de Ardoz, desde donde han partido para una estancia de cuatro meses y medio (después serán relevados por otros compañeros) con un objetivo fundamental: formar a la policía federal de Irak en la lucha contra el Daesh .
El GAR, emblema del combate a ETA durante la mayor parte de la historia de la banda terrorista doméstica, ya ha compartido su formación y bagaje en países como Afganistán, República Centroafricana, Líbano, Haití, Senegal, Bosnia o Kosovo.
Ahora se desplaza a Irak para sumarse a los 425 militares españoles que ya forman parte de la Coalición Internacional contra el Daesh y que tienen su base, la «Gran Capitán», en Besmayah, a unos 45 kilómetros de Bagdad.
Zoido les ha trasladado el orgullo de los españoles por la valentía con que afrontan la misión, acordado en Consejo de Ministros en diciembre, de instruir a las fuerzas de seguridad de Irak «enseñándoles lo necesario para hacer frente con éxito a un enemigo feroz y despiadado».
Jesús Gayoso , el teniente coronel jefe de los GAR, explica a Efe la «muy específica» tarea de su unidad, que llega al territorio iraquí para contribuir a la estabilidad del nuevo estado que se está construyendo. En suma, a su normalización, como pretende la Coalición Internacional.
Un país con tres policías: la federal, la local y la de fronteras. Los miembros del GAR comenzarán con la primera de ellas esa labor de formación de los agentes iraquíes, a los que pretenden «exportar» su experiencia antiterrorista aún a sabiendas de que el de ETA y el del Daesh son terrorismos diferentes, si bien con algunas similitudes que requieren estrategias policiales similares.
No se trata de desvelar esas técnicas que en cursos de un mes de duración el GAR intentará trasladar a los policías iraquíes, pero no se descarta que en esa formación pueda darse un salto cualitativo que permita patrullas conjuntas en las calles.
Todos los agentes de la unidad que se apuntaron -los 170 que lo hicieron- se presentaron voluntarios sin saber cuándo volverían ni las condiciones de su misión. Les bastó con saber que el destino era Irak.
Durante un mes estos agentes, todos ellos con conocimientos de inglés, han estado preparándose logísticamente y viajan acompañados de material como drones y otros para su propia protección y que a la vez pueda ser utilizado para la formación de los iraquíes.
El capitán del contingente, que ya cuenta con experiencia en una misión en Senegal, afronta el traslado «con la mejor disposición» para «entregar lo mejor que tenemos», según manifiesta a Efe.
Este mando también reconoce que ETA y Daesh son diferentes tipos de terrorismo , pero al final tienen pilares comunes donde se les puede atacar, por lo que asegura la lucha contra los etarras pueden ser «extrapolable» al Estado Islámico.
No son los únicos miembros del GAR que se despliegan este mes, mañana mismo otros 11 agentes de esta unidad partirán a Mauritania para contribuir también a la formación de la Gendarmería de ese país, en una misión liderada por EEUU bajo la denominación Flintloz y que compartirán con otros 120 militares españoles.