Efecto dominó para la política nacional
Las cifras abren el camino para el cambio de gobierno en Andalucía y la expulsión de los socialistas de la Junta
Si se confirma la aritmética que avanza el 90 por ciento de los votos escrutados, las elecciones andaluzas provocarán la reubicación de piezas en la política nacional. Las cifras abren el camino para el cambio de gobierno en Andalucía y la expulsión de los socialistas de la Junta. Un aviso a navegantes que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no puede ignorar. El test confirma sus peores temores: la mayoría de españoles constitucionalistas da la espalda a sus coqueteos con los partidos independentistas catalanes y el rival que más daño puede hacerle en clave nacional, Ciudadanos, es el que se ve directamente reforzado.
Los números también traerán repercusiones para el cuartel general de Génova, obligado a redefinir su estrategia electoral pensando en qué rol quiere adjudicar a Vox una vez que la irrupción de este partido se ha convertido en realidad. El pacto de gobierno podría ser una manera de neutralizar la feroz oposición que podría desarrollar esta formación con un gobierno de izquierdas pero los populares tendrán que decidir si quieren servirse de los votos de Vox para alcanzar la Junta.
Lejos de traer calma a la política nacional, las elecciones andaluzas probablemente la revolucionarán aún más. La posibilidad de un adelanto de las elecciones generales a la primavera seguramente cobre fuerza esta noche en La Moncloa como estrategia para cortar el crecimiento de Ciudadanos y Vox.
