Control al Gobierno desde el Parlamento: España, la excepción a la regla
El cambio de fecha del Consejo de Ministros complica que la oposición desarrolle su labor
El cambio de fecha del Consejo de Ministros complica el control al Gobierno que debe ejercer la oposición. El Ejecutivo de Pedro Sánchez se reúne ahora los martes, un día antes de la sesión de control en el Parlamento. Así, los grupos apenas tienen un margen de horas para rebatir las medidas propuestas por La Moncloa. Esta situación, en nuestro entorno, es inconcebible.
Alemania: control inmediato
Por Rosalía Sánchez (Berlín)
El gabinete de ministros de Merkel se reúne tres veces a la semana, (lunes, miércoles y viernes), pero es el miércoles el día designado para que el Consejo de Ministros defina sus decisiones. Cada Consejo de ministros es seguido de una rueda de prensa del portavoz de gobierno y de una sesión parlamentaria de 30 minutos destinada a que los diputados puedan hacer consultas o críticas sobre los asuntos del día. El Consejo de Ministros se reúne a las 9:30 y la sesión parlamentaria correspondiente tiene lugar en el Bundestag a las 13:00 cada miércoles. En la sesión semanal, cada diputado tiene derecho a formular al Gobierno hasta dos preguntas. Cada pregunta se puede dividir en dos subpreguntas. Está pensado como una forma de control inmediato.
Cada miércoles, además, tienen lugar en el Bundestag las Fragenstunden, sesiones en las que cada diputado puede realizar dos preguntas, sobre cualquier asunto, y que deben ser presentadas ante el presidente del Bundestag hasta las 12:00 de cada viernes o, por vía de urgencia, hasta las 12:00 del martes anterior a la sesión.
Si un grupo parlamentario no está de satisfecho, puede solicitar una Aktuellstunde, un debate reducido con turnos de palabra de cinco minutos que tiene lugar inmediatamente después de la Fragestunde. Además, cada diputado alemán puede hacerle al gobierno hasta cuatro preguntas por mes y por escrito cuya respuesta, también por escrito, ha de obtener en el plazo legal de una semana. Las preguntas y respuestas se publican en un impreso semanal.
Francia: Consejo el miércoles; examen al Gobierno el martes siguiente
Por Juan Pedro Quiñonero (París)
En Francia, los Consejos de Ministros se celebran los miércoles y las preguntas al Gobierno se formulan los martes: la oposición tiene una semana para «estudiar» los temas que desea tratar. La sesión de preguntas, en la Asamblea Nacional (AN), dura dos horas y existe un «derecho a réplica» con el fin de poder establecer un «diálogo» entre diputados y ministros.
La sesión de preguntas es retransmitida en directo por «La Chaîne parlementaire» (LCP), una cadena de tv ultra minoritaria, consagrada al «seguimiento» muy oficial y «aséptico» de los trabajos de la Asamblea Nacional y el Senado. Las sesiones de preguntas en la AN no suelen tener un éxito ni incidencia política de fondo: oposición y Gobierno utilizan la atalaya parlamentaria para lanzar rayos y truenos, repitiendo posiciones conocidas, por ambas partes.
No es frecuente que los grandes líderes políticos nacionales intervengan en las sesiones de preguntas, dejando ese «trabajo» a diputados que desean ganar visibilidad ante sus electores.
El modelo electoral francés (uninominal, a dos vueltas), favorece el contacto directo de los diputados con sus electores, que votan/eligen a un personaje local. De ahí que las cuestiones locales tengan una importancia tradicional. Salvo cuando los presidentes de grupo o partido desean salir al paso o denunciar decisiones gubernamentales, esperando que las preguntas parlamentarias tengan eco en los medios de comunicación.
Italia: la Constitución blinda a la oposición
Por Ángel Gómez Fuentes (Roma)
En Italia las reuniones del Consejo de ministros no tienen fijado siempre una fecha concreta de la semana, porque pueden variar, tanto de día como de hora, según la agenda del gobierno y los asuntos a tratar. Por ejemplo, una de las últimas reuniones fue en la tarde del jueves, día 9 de enero. Las seis anteriores se celebraron en diversos días de la semana y a distintas horas: Dos un lunes, y una en jueves, viernes, sábado y domingo.
La Constitución italiana asigna al Parlamento, tanto a la Cámara de diputados como al Senado, la función de ejercer el control del gobierno, lo que se concreta con interrogaciones, interpelaciones y mociones. Una interrogación sobre determinada cuestión se presenta por escrito al ejecutivo o a uno de sus miembros. La respuesta se dará oralmente en una sesión parlamentaria, prevista expresamente, denominada «question time». Las interpelaciones las presenta un parlamentario al gobierno para obtener informaciones, en forma más detallada que con respecto a las interrogaciones, en relación con un hecho del gobierno o para conocer la orientación política sobre algo concreto.
La situación que ahora se plantea en España es inconcebible en Italia. Sería imposible que un gobierno italiano pretendiera realizar una estrategia para amordazar a la oposición impidiéndole ejercer el control parlamentario. Lo impide además la Constitución. El expresidentes del gobierno, Felipe González, vaticinó en el 2015 un parlamento español «a la italiana, pero sin italianos». Tenía razón.
Reino Unido: preguntas sorpresa en el parlamento
Por Ivannia Salazar (Londres)
El Gabinete del Reino Unido, el equivalente al Consejo de Ministros de España, está compuesto por los Secretarios de Estado de todos los departamentos y los ministros. Sus reuniones suelen ser semanales, pero el primer ministro puede convocar encuentros con una frecuencia mayor o menor, según su criterio. Normalmente se reúnen para discutir los temas más importantes para el Gobierno los jueves por la mañana, aunque el día ha sufrido variaciones a lo largo de la historia reciente. Por ejemplo, durante el gobierno de Theresa May se celebraba los martes.
Los diputados de la Cámara de los Comunes controlan al Gobierno de dos formas. Una es con la sesión de «Prime Minister's Questions» o «preguntas al primer ministro», que se celebra los miércoles y que es semejante a la sesión de control en España. Es bastante teatral, con un debate muy acalorado y la gran diferencia es que la duración es menor y que tiene el «efecto sorpresa», ya que el «Premier» no sabe qué le van a preguntar los parlamentarios, así que tiene que ir preparado para una variedad de temas. La mitad de las preguntas las hace su propio partido y la otra mitad la oposición. En la práctica, suele ser preguntado solo por los temas que maneja directamente. El otro mecanismo son las preguntas orales o escritas que los diputados formulan directamente a los ministros según un orden previamente establecido. Este turno de preguntas tiene lugar durante una hora, de lunes a jueves y los parlamentarios presentan las preguntas orales al menos tres días antes.
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