El Congreso prevé lanzar el martes la investigación por Kitchen
Vox deja su posición en el aire mientras Ciudadanos adelanta que apoyará la comisión
Una semana va a tardar el Congreso de los Diputados en poner en marcha la comisión de investigación sobre la Operación Kitchen . El portavoz de ERC , Gabriel Rufián , anunció la iniciativa el martes de la semana pasada, el jueves la registró al tiempo que PSOE y Podemos replicaban su movimiento, y el próximo martes ambas peticiones estarán sobre la Mesa de la Cámara Baja donde recibirán la pertinente calificación.
Fuentes socialistas consultadas por ABC dan por hecho que los servicios jurídicos del Congreso darán vía libre a la comisión aunque se refiera a hechos sucedidos en una legislatura anterior, ya que el Reglamento permite crear este tipo de órganos para investigar «cualquier asunto de interés público».
El único requisito es que la iniciativa sea propuesta por «dos grupos parlamentarios o la quinta parte de los miembros de la Cámara». Una exigencia que cumple tanto la petición presentada por los socios de coalición como la impulsada por ERC, ya que ésta encontró apoyo en EH Bildu y el Grupo Plural.
De cara a la reunión de la Mesa el próximo martes hay una incógnita y es qué posición va a adoptar Vox. La formación que preside Santiago Abascal tiene voz y voto en este órgano a través del vicepresidente cuarto, Ignacio Gil Lázaro y se tendrá que pronunciar a favor, en contra o abstenerse. La dirección de Vox, de momento, evita adelantar cuál será el sentido de su voto.
Todos contra el PP
Quién sí ha adelantado su posición es la presidenta de Ciudadanos , Inés Arrimadas . La formación naranja no está presente en la Mesa del Congreso pero sí en la Junta de Portavoces, el órgano al que llegará después la comisión de investigación y que decidirá cuándo debe debatirse en el pleno.
En una entrevista en RNE, Arrimadas subrayó que su formación votará a favor de que el Congreso investigue la Operación Kitchen ante la gravedad de los presuntos hechos y por criterios de transparencia. En este sentido, también exigió que la Cámara Baja analice la supuesta corrupción de Unidas Podemos , tal y como impulsó el PP . Pero esta iniciativa fue tumbada ya el martes pasado por los partidos de la coalición y sus socios.
La comisión de investigación por Kitchen sumará así a Ciudadanos con PSOE, Podemos, ERC, EH Bildu, JxCat, BNG, Más País y Compromís, entre otros . Si finalmente Vox se une también este bloque, los populares se quedarán solos y el nuevo órgano se convertirá en una suerte de «todos contra el PP», como ya sucedió durante la investigación de la supuesta financiación irregular de Génova.
La reunión de la Junta de Portavoces que verá la comisión Kitchen se espera para el martes 22 de septiembre y los grupos pueden decidir llevarla al pleno de la siguiente semana o esperar al momento político que consideren más oportuno. Por ahora, PSOE y Podemos no desvelan el calendario que manejan pero si quisieran una aprobación rápida podrían obtener el «sí» del pleno en la última semana de septiembre.
A partir de ahí, los socios de coalición y los independentistas tendrían que negociar quién presidirá este órgano y qué cuatro diputados serán sus vicepresidentes (dos) y sus secretarios (otros dos). Lo esperable es que los socialistas controlen tres de estos cargos junto a Podemos o cediendo alguno a ERC, dado que también ha impulsado la creación de esta comisión. Una vez que los grupos negocien el reparto de cargos y la elección de portavoces, la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet , fijará el día en que se constituirá este órgano.
Plan de trabajo
La nueva comisión no podrá empezar a llamar a comparecientes desde el primer día. Su primera labor será redactar y aprobar un plan de trabajo en el que quede definido un calendario y las personas que van a ser llamadas. Éstas tendrán que ser avisadas con quince días y se les tendrán que notificar «los extremos sobre los que se deba informar» .
Las conclusiones de las comisiones de investigación no son vinculantes para los tribunales ni afectan a las resoluciones judiciales, pero gozan de un elevado valor político. Deben plasmarse, además, en un dictamen que será discutido en el pleno .
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