Confirmada la condena de cárcel contra el coronel que abusó de una teniente en el Hospital Gómez Ulla
El Tribunal Supremo ratifica la pena de dos años y nueve meses de prisión, además de una indemnización de 5.000 euros por los daños morales provocados a la víctima
El Tribunal Supremo (TS) confirma la condena a dos años y nueve meses de prisión para un coronel que en 2019 era jefe de la Farmacia del Hospital Militar Gómez Ulla por los delitos continuados de abuso sexual y de autoridad contra una teniente que trabajaba como enfermer a en las Urgencias de dicho centro hospitalario.
La Sala Penal del TS desestima el recurso de casación planteado por el condenado contra la sentencia del Tribunal Militar Central que le impuso la citada pena de prisión, además de una indemnización de 5.000 euros para la afectada por daños morales, suspensión de empleo e inhabilitación especial para sufragio pasivo durante el mismo tiempo de condena.
El relato de hechos probados recoge que el 24 de julio de 2019 el coronel besó en los labios a la teniente de forma repentina cuando ambos se encontraban en el almacén de la Farmacia, hasta donde la llevó con la excusa de darle unos tubos de protección solar. La teniente, que en ningún momento había consentido, se separó y le dijo que no quería nada con él, además de recordarle que tenía familia. Pese a su negativa, el coronel insistió en besarla . Posteriormente, ya en el despacho, lo volvió a hacer. Además, realizó tocamientos primero en las nalgas, después en el pecho y por último en los genitales de la teniente.
El coronel la envió un mensaje de WhatsApp en el que le decía que habían sido unos «besos maravillosos». La víctima le contestó que «sus besos y manoseos forzados me dan asco. Lo peor [es] que ha utilizado su graduación sabiendo que siempre voy a ser la perjudicada ». El condenado le pidió perdón por mensaje en distintas ocasiones. La teniente no respondió a ninguno de ellos, según la sentencia del Supremo.
La Sala de lo Penal del TS comparte el hilo argumental y la exposición de la sentencia recurrida, que consideró que la versión de la teniente, corroborada por los testimonios, periciales y mensajes de WhatsApp, era creíble y constituía prueba de cargo suficiente para sustentar el relato de hechos probados frente a la versión del coronel.