La colaboración de la Guardia Civil con la policía de Serbia permite desmantelar la producción de marihuana de la mafia del Este en España

Muy cerca de El Pilar en este zulo de la iglesia ortodoxa rusa de Zaragoza, 600 plantas era cuidadas con mimo mientras arriba se practicaba el rezo. Era la nota discordante de un negocio millonario  que los líderes serbios detenidos  estaban empezando  en España. En un año y medio montaron 12 plantaciones de 10.000 metros cuadrados. 15.999 plantas intervenidas, 3 cosechas en un año. Todo con enganches ilegales, dinamizados para no ser descubierto. Sofisticada técnica que cuidaba súbditos serbios explotados. Se instalaron en  Huesca, Tarragona  para estar cerca de la frontera y sacar la droga  camuflada en camiones de una empresa pantalla. Medio millón de euros blanqueados, 100.000 en cuantas bancarias bloqueadas. Un lavado de dinero dirigido por la mafia serbia desde serbia. La estrecha vía de colaboración entre la Guardia Civil y el Servicio de Lucha contra el Crimen Organizado de la Policía serbia con el apoyo de Europol. Además, Eurojust encauzó una serie de reuniones de coordinación entre las autoridades judiciales que en cada país dirigían las investigaciones. Ese proceso permitió la constitución, a iniciativa española, de un Equipo Conjunto de Investigación (ECI), el primero creado con un país extracomunitario y también el primero en la historia firmado entre ambos países.