Los ciudadanos rusos ya sufren los efectos de las sanciones
Occidente combate a Putin con una extensa artillería económica. Lo más visible está a pie de...
Occidente combate a Putin con una extensa artillería económica. Lo más visible está a pie de calle. La vida de los ciudadanos rusos se hace más incómoda por momentos. Con sus rublos devaluados cada vez pueden comprar menos cosas. Intentan hacerse con la moneda física porque ya no pueden pagar con sus tarjetas Visa o Mastercad El goteo de compañías que cierran su actividad en el país es incesante. En el IKEA de Moscú ayer se formó una larga cola porque era el último día que estaba abierto. El gigante sueco se une a otras compañías como Mango o HyM. Inditex sin embargo mantiene abiertas sus 527 tiendas en Rusia. En el sector automovilístico, Mercedes acaba de anunciar la suspensión del envío de 400 furgonetas. Otras importantes marcas han paralizado o limitado su actividad.La presión también llega por parte de las compañías energéticas y alcanza incluso a la industria del entretenimiento que ha suspendido sus producciones allí. Acciones que intentan minar al enemigo provocando el malestar de los ciudadanos de a pie contra su Gobierno.