Un carterista llama a la policía para denunciar que no le dejaban entrar en el metro
«¿Está la policía? Manden una patrulla por favor», reclamaba el hombre, confesando a las autoridades que era carterista pero que «no estaba robando»
«¿Esta la policía? Manden una patrulla por favor», es el propio carterista el que llama a la policía al sentirse acosado. «Yo soy un ladrón, por favor», reconocía su oficio a las autoridades durante la «esperpéntica» llamada de teléfono, como así lo calificaron algunos testigos de la escena.
Pide ayuda porque le han impedido la entrada al metro y suplica al 112: «Quiero volver a casa y no me dejan pasar al metro un grupo de chicos», refiriéndose a la patrulla ciudadana que le estaba cortando el paso; los mismos que poco más tarde le impidieron acceder a un taxi, avisando al conductor que se trataba de un carterista.
La persona que le atiende al teléfono no debe dar crédito a lo que oye: «Soy carterista, señor, pero yo no estaba robando, por favor manden una patrulla», insistía ante un policía que termina por colgarle.
Con la pandemia y la distancia de seguridad los carteristas habían abandonado el metro, pero ahora vuelven a la carga. Con ellos, y al acecho, esta peculiar vigilancia de la patrulla ciudadana.