El cambio, en la Junta o en Moncloa, que PSOE y PP buscan en Castilla y León
Como todas elecciones, ésta también: "Estamos en un momento histórico", decía el candidato de...
Como todas elecciones, ésta también: "Estamos en un momento histórico", decía el candidato de Unidas Podemos, Pablo Fernández. Las encuestas, casi todas, dan un único ganador. "El Partido Popular, con Alfonso Fernández Mañueco al frente, va a ganar las elecciones y va a gobernar. Basta ya de fake news", proclamaba el líder del PP, Pablo Casado. Aunque la venda está puesta por si hay herida. "Quien se la juega es el Partido Popular de Castilla y León", subrayaba el candidato a la reelección, Alfonso Fernández Mañueco. El resultado, sí o sí, apunta al cambio. El PP espera forzarlo en Moncloa. El PSOE, con Luis Tudanca, "vamos a devolver la ilusión a esta tierra", quiere lograrlo en la Junta. "Van a abrir las puertas al cambio y a la esperanza y se la van a cerrar a la coalición del Partido Popular y la ultraderecha", decía el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. "Con los socialistas, ni hablaremos", apuntaba Santiago Abascal. "Pactaremos únicamente con el Partido Popular. Que digan ellos con quién van a pactar", emplazaba el presidente de Vox. Aunque a lo mejor tampoco llega. "Soñaban con la mayoría absoluta y ahora les persigue la pesadilla del ridículo que pueden hacer el próximo domingo", vaticina Inés Arrimadas, la presidenta de Ciudadanos. Unas elecciones que parecían rodadas pero que pueden acabar en atasco. "A esta Comunidad se le ha tratado como si fuéramos todos idiotas", se quejaba el candidato naranja, y exvicepresidente de la Junta, Francisco Igea. Y todo puede depender de pocos escaños. De los de la Unión del Pueblo Leonés, los de Por Ávila, o, primera gran prueba, los de la España Vaciada. Una campaña marcada por una polémica, la de las macrogranjas, y por lo reñido que apuntan los sondeos.