Aznar y Trillo declararán por videoconferencia como testigos en el juicio de la caja B
Los expresidentes del Gobierno del PP están citados el 24 de marzo

El expresidente del Gobierno José María Aznar y el exministro de Defensa Federico Trillo declararán como testigos en el juicio sobre el pago de parte de la reforma de la sede del PP con dinero de la caja B por videoconferencia, tal y como habían pedido y como ha acordado la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.
En una providencia notificada este martes, el tribunal acuerda que también comparezcan por vía telemática los testigos Jaime Ignacio del Burgo y Noelia Fernández , que igualmente lo habían solicitado. Todos están convocados en la Audiencia Nacional la próxima semana.
En el caso de Aznar, está citado para testificar el día 24, igual que el también expresidente Mariano Rajoy, a petición de varias acusaciones populares. En esa misma jornada se prevé la declaración del exministro José María Michavila.
Lo harán después de que hayan declarado como testigos Ángel Acebes, que compareció este lunes; y Jaime Ignacio del Burgo, Pío García Escudero, Javier Arenas, Francisco Álvarez Cascos y María Dolores de Cospedal, que están citados el día 23 de marzo junto al expresidente del Gobierno balear Jaume Matas, el exdiputado Eugenio Nasarre y el periodista Pedro J. Ramírez.
Ya el día después, se espera en la Audiencia Nacional a Rodrigo Rato y Federico Trillo, este ya confirmado por videoconferencia; además del número dos de la trama Gürtel Pablo Crespo, el empresario Alfonso García Pozuelo y el expresidente de OHL Juan Miguel Villar Mir.
La primera vez de Aznar, la segunda de Rajoy
Será la primera vez que Aznar -cuya declaración la solicitó la acusación popular ejercida por Asociación Abogados Demócratas por Europa (Adade) - comparezca en la Audiencia Nacional para explicar qué sabe sobre la presunta contabilidad paralela de los 'populares', informa Europa Press.
Fue en la comisión del Congreso que investiga la presunta financiación ilegal del PP , cuando aseguró que «no existe ninguna caja b» en su partido y negó el cobro o la orden de pagos de sobresueldos «ilegales» a dirigentes de la organización que presidió entre 1990 y 2004.
En cuanto a Rajoy, su testifical ha sido interesada por la misma acusación popular y por la de Izquierda Unida (IU). Fue precisamente Adade quien consiguió que este ex jefe del Ejecutivo compareciera ante el tribunal de la Audiencia Nacional que juzgó los primeros años de actividades de la trama Gürtel, que condenó al PP como partícipe a título lucrativo.
En aquella ocasión, en la que aún era presidente del Gobierno, afirmó que «jamás» supo nada de la presunta caja 'B' del PP porque sus responsabilidades en el partido eran «políticas», no contables . Sin embargo, la Audiencia Nacional cuestionó la credibilidad de su testimonio. Ahora, podrá responder sobre el mismo asunto, si bien no se someterá al careo con el extesorero popular Luis Bárcenas que instaba su defensa. La Sala considera que no ha lugar.
Las trabajadoras de Unifica
Las testificales del juicio se inauguraron el pasado miércoles, cuando terminó la declaración de los acusados Bárcenas, el exgerente del PP Cristóbal Páez, los administradores de la empresa Unifica, que hizo las obras y una de sus trabajadoras.
La sesión de este martes, precisamente, se ha centrado en aquellas labores con la declaración de varias personas involucradas, como la que fue jefa de obra, que han aportado su conocimiento sobre cómo se desarrolló el proyecto y ha aclarado que si bien se encargaba de los presupuestos y las certificaciones, no entregaba esa información al PP sin el visto bueno de sus superiores.
Ella, como otras dos personas que trabajaron en Unifica, han negado tener constancia de irregularidad alguna o manipulaciones en el proceso de facturación y han depositado la responsabilidad de las finanzas de la empresa en el administrador Gonzalo Urquijo, que está acusado. Él era, según han coincidido, quien llevaba el proyecto en concreto de la sede del PP, no así su socia, Belén García, también acusada y que se dedicaba a otros proyectos.
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