La Audiencia Nacional dará a Villarejo las copias de sus agendas

No le van a entregar las agendas que le intervinieron en las entradas y registros, pero sí se le proporcionarán copias. Es la pequeña victoria que ha obtenido el comisario José Manuel Villarejo esta semana en la Audiencia Nacional después de meses reclamando que se le devolviesen los cuadernos, cientos de páginas de apuntes que se han convertido en indicios de presuntos delitos a lo largo y ancho del sumario contra él.

En la causa obran dos tandas de cuadernos personales. La primera le fue intervenida a su detención en noviembre de 2017 y permanece bajo custodia judicial. Contienen apuntes de hasta el día antes de su detención. Pasaron más de dos años y medio hasta que finalmente se digitalizaron y se pusieron a disposición de acusaciones y defensas, incluida la suya, por el sistema de comunicación telemática de los juzgados.

La segunda tanda, que se corresponde con los cuadernos más antiguos, no ha tenido el mismo destino. Se la incautaron en otro registro practicado en su domicilio en octubre de 2020 por cuenta de una de las piezas separadas. La decisión del juez fue digitalizarlas y ponerlas a disposición de acusaciones y defensas pero allí mismo, en la sede del juzgado, sin posibilidad de visualizarlas desde otro lugar y por descontado, de descargarlas.

En esa decisión había volcado todo su empeño Villarejo. Viene reclamando que se le entreguen los originales para poder desplegar su derecho de defensa porque en esos papeles, aduce, está su propia memoria. Entiende además que no tienen que permanecer bajo custodia «como instrumentos 0 efectos del delito», ya que están plagados de «reflexiones personales y privadas», una intimidad que se ha puesto a la vista de todos.

Sin embargo, una y otra vez le fue negada su entrega porque se entendía que pudiendo, como el resto de abogados, consultar el contenido en sede judicial, no había vulneración del derecho de defensa. «Tales razonamientos son validos para desestimar la petición de entrega de las agendas que, como eventuales medios de prueba documental, han de permanecer en las actuaciones. No sirven, sin embargo, para sustentar el rechazo de la petición subsidiaria de entrega de copias, que el apelante , en su condición de parte en el presente procedimiento, formula», dice ahora la Sala.

Entiende que su derecho a acceder a los materiales para defenderse sólo se exceptúa « en el caso de documentos declarados secretos 0 reservados, condición que no consta tengan , porque no lo dice el auto recurrido, las agendas incautadas». Ordena así no que le devuelvan los cuadernos, que permanecerán bajo custodia del juzgado, pero sí que se le proporcionen copias.