Madrid responde a Londres que las aguas que rodean el Peñón son españolas
España afirma que la «actitud hostil» de Gibraltar impide la cooperación contra el crimen organizado
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El Gobierno español culpa a la «actitud hostil» de las autoridades locales de Gibraltar de que no haya una mayor cooperación en la lucha contra el crimen organizado en la zona. Así lo pone de relieve una carta remitida por el secretario de Estado para la Unión Europea, Fernando Eguidazu, al ministro británico para Europa, David Lidington.
La carta de Eguidazu, a la que tuvo acceso ABC, es respuesta a la que le envío Lidington el pasado día 11, en la que expresaba la indignación del Reino Unido por las «incursiones ilegales» del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Guardia Civil en «aguas territoriales británicas de Gibraltar» . Se refería con ello al hecho de que el día 9 embarcaciones de la Benemérita llegaran hasta las costas de Sandy Bay en el Peñón, en persecución de unos contrabandistas.
Eguidazu indica que desde el Servicio de Vigilancia Aduanera se efectuó una llamada a las 2:50 horas de la madrugada del 9 de agosto a la Policía de Gibraltar para avisar de que l a embarcación se acercaría al Peñón en el curso de una persecución, una vez que se conoció hacía donde se dirigía. Añade que, gracias a ello, la Policía de Gibraltar «pudo estar en el lugar del desembarco y pudo detener a los narcotraficantes , por lo que no puede hablarse de falta de cooperación por nuestra parte».
Precisa el secretario de Estado que no se puede decir que hubiera incidente alguno «y menos aún una incursión ilegal», ya que «las Fuerzas de Seguridad españolas han llevado a cabo actividades rutinarias de persecución de delitos en aguas españolas, cumpliendo con su obligación en cumplimiento de la Ley» .
Insiste Eguidazu en que la posición de España respecto de los espacios cedidos y no cedidos a Gran Bretaña por el Tratado de Utrecht permanece inalterada desde entonces. «España –recuerda– no reconoce al Reino Unido otros derechos y situaciones relativos a los espacios marítimos de Gibraltar que no estén comprendidos en el artículo X del Tratado de Utrecht de 1713».
En su carta, el secretario de Estado, manifiesta a Lidington que, al margen de las respectivas posiciones de España y el Reino Unido sobre la jurisdicción de las aguas, acoge «muy favorablemente» su ofrecimiento cooperación en la lucha contra el crimen organizado en la zona, y expresa la voluntad del Gobierno español de «explorar fórmulas para mejorar la cooperación con el Reino Unido en este ámbito».
No obstante, subraya que «el mayor obstáculo para hacer efectiva dicha cooperación, ha sido en los últimos tiempos la actitud hostil de las autoridades locales gibraltareñas al respect o como hemos venido denunciando de forma reiterada».
Eguidazu reitera en su misiva a Lidington «la plena disposición de España para explorar fórmulas para mejorar la cooperación con el Reino Unido en materia de lucha contra la delincuencia organizada y para iniciar el mecanismo ad hoc de cooperación regional tan pronto como lo consideréis oportuno».
Eguidazu señala, como prueba de esa buena voluntad, la carta que recientemente envió el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ignacio Ybáñez, a la directora para Europa del Foreign Office, Jill Morris, en la que manifestaba esa disposición de España a poner en marcha el citado mecanismo de cooperación en el Campo de Gibraltar «a partir del mes de septiembre».
La formación de «grupos ad hoc» fue propuesta por el Reino Unido después de que España diera por acabado el Foro Trilateral de Diálogo, y, como recuerda Eguidazu en su carta, «se trataría de reuniones informales a nivel técnico para intercambiar información y mejores prácticas con el objetivo de mejorar la cooperación regional en asuntos de interés mutuo y no tratarían o afectarían a cuestiones de soberanía o jurisdicción».
Las conversaciones tendrían lugar en Bruselas con participación del Reino Unido y de España, así como de las autoridades locales de Gibraltar, la Junta de Andalucía y la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar. La Comisión Europea sería invitada a participar como observadora .
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