Los alcaldes de la izquierda radical ven prioritaria la memoria histórica
Retirada de símbolos franquistas, creación de memoriales y centros e incluso toda un concejalía dedicada a la materia. Y en los primeros 100 días
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Los nuevos ayuntamientos en manos de partidos escorados a la izquierda más radical han situado entre sus prioridades de gobierno una reivindicación que llegó de la mano del socialista José Luis Rodríguez Zapatero: la memoria histórica .
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena , apuesta por levantar un Museo de la Paz y la Memoria en el suelo de la cárcel de Carabanchel y trabaja en adecuar el callejero de la capital a la Ley para borrar el más de un centenar de referencias al franquismo. Pero no es la única. En apenas un mes al mando de ayuntamientos, los gobiernos de la izquierda populista han creado concejalías específicas para sus reinvindicaciones en esta materia e incluso destinado parte de los recursos de las arcas municipales a tal menester.
En Barcelona, el impulso en la aplicación de la Ley de Memoria Histórica estaba recogido en el programa de Barcelona en Comú. Por ahora, la nueva alcaldesa, Ada Colau , no ha concretado ningún cambio en el callejero, pero ya ha dado algún paso en este sentido. A finales de junio, nombró un comisionado de Estudios Estratégicos y Programas de Memoria. Se trata del historiador Xavier Domènech , miembro de Procés Constituent, la plataforma que integraba Barcelona en Comú junto a Podemos e ICV.
Otro objetivo del programa es « impulsar una revisión completa del nomenclátor y los espacios de memoria de la ciudad ». «Para garantizar que éste quede libre de referencias apologéticas en la memoria del esclavismo, el franquismo y el fascismo». La alusión al «esclavismo» podría propiciar alguna de las primera «víctimas» de la reforma del callejero barcelonés: la céntrica plaza dedicada a Antonio López, Marqués de Comillas. Ya en el año 2010, la entidad SOS Racismo y los sindicatos CC.OO y UGT pidieron al Ayuntamiento de Barcelona retirar este monumento por el pasado como traficante de esclavos en Cuba que se le atribuye al famoso empresario y banquero cántabro.
Concejalía específica
La llegada de Por Cádiz Sí Se Puede y de José María González «Kichi» como alcalde ha traído como novedad en el nuevo organigrama municipal la creación de la Concejalía de Memoria Democrática . Oficialmente, las funciones de esta delegación pasan por dirigir, inspeccionar e impulsar las actuaciones necesarias para la recuperación de la memoria histórica de las víctimas de la Guerra Civil Española y la Posguerra, y a su reconocimiento institucional y social. Además, Ganemos -integrado en la candidatura- incluía en su programa electoral realizar cambios en el callejero, la creación de una base de datos de víctimas y una oficina de apoyo, así como promover el conocimiento y la información sobre la memoria histórica.
Al otro lado del mapa, las mareas gallegas -que se han hecho con el poder en tres de los principales consistorios de la región- también han dado a la memoria histórica un lugar privilegiado en su acción de Gobierno. En la Coruña, la Marea Atlántica anunció su compromiso a sustituir todos los nombres de calles y espacios públicos asociados. Y confirmó que lo haría en los 100 primeros días de gobierno. El alcalde, Xulio Ferreiro , ya se ha reunido con la Comisión de la Recuperación de la Memoria Histórica de La Coruña (CRMH), a la que le trasladó la intención de su Gobierno de borrar cualquier tipo de alusión a la época franquista y deslizó que no descarta suprimir los símbolos de varias plazas y los retratos de militares golpistas.
En Santiago, el programa de Compostela Aberta tiene un apartado de Memoria Histórica . El alcalde, Martiño Noriega , incluyó en su discurso de investidura a Ánxel Casal , alcalde republicano y galleguista de Santiago fusilado en el franquismo al que recordó para «recuperar sus valores», y a las Dos Marías, dos hermanas compostelanas emblema de la ciudad, Coralia y Maruxa, también represaliadas. Por su parte, en el acuerdo programático de Ferrol en Común y el PSdeG para gobernar la ciudad departamental se recoge la creación de un centro de interpretación de la memoria histórica. Su alcalde, Jorge Suárez , ya avanzaba antes de las elecciones que la intención de su formación era retirar de «manera inmediata» los escudos franquistas de los edificios institucionales.
Monumento a los Caídos
Todos los partidos que conforman el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Pamplona -Bildu, Geroa Bai, Aranzadi e Izquierda-Ezkerra- tenían en sus programas medidas para cambiar el Monumento a los Caídos, uno de los edificios más emblemáticos de la capital navarra. En el acuerdo programático firmado el mismo día de la toma de posesión del alcalde Joseba Asirón se propone la convocatoria de un concurso internacional de ideas para hacer del Monumento a los Caídos un espacio dedicado a la libertad, la memoria y la cultura de la paz y los Derechos Humanos. En él se realizaban exposiciones, aunque también acoge las tumbas del general Mola y del general Sanjurjo y hay misas en su honor.
En Valencia, el programa electoral de Compromís incluye la retirada de nombres de calles y plazas plazas con reminiscencias franquistas. El objetivo del Ayuntamiento pasa por ligar la memoria histórica con el colectivo gay y la «represión franquista» y pretende levantar un monumento para ello. También pretende incidir en la capitalidad de Valencia durante la República y en la Guerra de Sucesión de 1714. En el documento de las treinta primeras medidas prioritarias suscrito por Joan Ribó con sus socios de gobierno (PSOE y Valencia en Comú -marca blanca de Podemos en la ciudad-) no figuran este tipo de medidas, que sí se incluyen en su programa electoral.
De norte a sur y de oeste a este, los partidos de la izquierda populista consideran una prioridad revisitar el pasado , en gran medida porque uno de sus ejes ideológicos es la negación de la Transición como un proceso político de éxito y concordia nacional.
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