El PSOE, sorprendido por el adiós de Griñán antes de saber si está procesado

En el PSOE causó ayer extrañeza el adiós oficioso de José Antonio Griñán a la política sin esperar siquiera a saber si será procesado por el Tribunal Supremo en el caso de los ERE , según distintas fuentes consultadas por ABC.

El todavía senador y expresidente de la Junta de Andalucía, que no ha comentado su decisión a Pedro Sánchez y tampoco a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, deja en situación muy incómoda al otro expresidente de la Junta, Manuel Chaves, porque le presiona para que abandone también el escaño.

De hecho, el portavoz de la Junta, Miguel Ángel Vázquez, que también lo fue del gobierno Griñán, rehusó ayer pronunciarse porque el Ejecutivo autonómico no tiene «conocimiento directo y fehaciente» de esa decisión. «El Gobierno andaluz desconoce el contenido de esa información», señaló Vázquez.

Igualmente, el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados, Antonio Hernando, aseguró que desconoce que Griñán tenga previsto dejar la política activa y que lo que hagan él y Chaves es una «decisión personal».

Distanciado de Susana Díaz desde que la presidenta andaluza dijera que él y Chaves tendrían que dejar el Senado nada más ser imputados, en lugar de cuando se les abra juicio oral, si llega el caso, Griñán no quiere siquiera que el PSOE andaluz contemple la posibilidad de volver a nombrarle senador autonómico en esta legislatura.

Las declaraciones del expresidente andaluz diciendo, a la salida de su declaración ante el magistrado instructor del Supremo que en el caso de los ERE ha habido «un gran fraude», han terminado por distanciar a Griñán tanto de Chaves y otros encausados, Gaspar Zarrías y José Antonio Viera, como de Díaz y los actuales dirigentes de la Junta de Andalucía que lo ven una «frivolidad» a destiempo.